Peñíscola no aportó la justificación de la demanda de agua que genera su PGOU

La falta de recursos hídricos acreditados para la población prevista en los documentos urbanísticos está en la base de buena parte de los informes desfavorables de la CHJ. En una respuesta del Gobierno central emitida el 30 de diciembre, se explica la negativa de la confederación a las pretensiones urbanísticas del consistorio de Peñíscola, que solicitó informe al PGOU en 2004. En 2005 se le requirió documentación como la justificación de la demanda de agua generada por el PGOU y el origen previsto o lugares de procedencia del recurso con el que va a abastecerse dicha demanda, así como la acreditación del derecho al uso de agua mediante título. A tenor de la respuesta, «hasta la fecha el Ayuntamiento no ha cumplimentado el requerimiento anterior, por lo que la CHJ se ve imposibilitada para emitir un pronunciamiento en la materia». En este sentido, realiza sus propias cuentas con la demanda que supondrían las previsiones de concesión de aguas subterráneas para una población en 2028 de 94.106 habitantes y los habitantes potenciales de 168.254 habitantes que señala la memoria del PGOU, «muy superior a la previsión hecha en el expediente concesional».

En la actualidad, Peñíscola sólo cuenta con un caudal disponible para 5.000 habitantes y el resto de caudales «está siendo tramitado en procedimientos concesionales aún no sometidos al análisis de compatibilidad con la planificación hidrológica», señala.

En respuesta al diputado de Iniciativa-CV Joan Herrera se indica que tampoco «se tiene constancia de solicitud alguna de caudales regenerados por la EDAR de Peñíscola, ni con destino a riego de campo de golf ni para otros usos».

Por otro lado, les informan de que la petición de un informe relativo a la disponibilidad de agua en el Alt del Fardatxo fue contestada en diciembre de 2008 con informe desfavorable «por no respetar la ordenación propuesta del dominio público hidráulico, ni acreditar disponibilidad de recursos hídricos».