Hallan un feto de cinco meses en el váter de una vivienda en Valencia

Los hechos ocurrieron sobre las once menos cuarto de la noche del martes en la calle de Gayano Lluch, cuando una llamada efectuada al 112 requería la intervención de un SAMU, para atender a una joven de 22 años que se encontraba en mal estado dentro de una vivienda.

Trasladados los servicios de urgencias médicas hasta la dirección señalada, a su vez, requerían la presencia de la policía, y una patrulla del retén de Benicalp de la Policía Local se personaba en el domicilio donde los agentes eran informados por el personal médico de la ambulancia sobre la aparición de un feto ya fallecido en el interior de la taza del vater y con el cordón umbilical anudado, siendo este, producto del aborto de la joven que precisaba la atención sanitaria debida a una importante hemorragia que padecía tras haber abortado.

La joven, nacida en la Republica Dominicana, manifestaba a los agentes que se encontraba embarazada de cinco meses y tras sufrir fuertes dolores había comenzado un parto espontáneo ( parto no provocado), motivo por el que requirió la atención del médico.

Momentos más tarde la misma mujer reconocía que durante el día había ingerido 3 pastillas vía oral y dos más por vía vaginal de un medicamento llamado Cytotec, por lo que los hechos fueron puestos en conocimiento del Cuerpo Nacional de Policía ante la sospecha de que el aborto hubiera sido provocado.

La joven fue trasladada e ingresada en un hospital y el médico forense se personaba, procediendo al levantamiento del cadáver y posterior traslado del feto al Instituto de Medicina Legal (I.M.L) .

El Cytotec en España se expende en las farmacias bajo receta médica a un precio de 10 euros y está indicado en la prevención de lesiones gastroduodenales y úlceras gástricas estando contraindicada su prescripción durante los embarazos. Sin embargo, en los países suramericanos es utilizado en abortos médicos. En nuestro país se adquiere a través de Internet y en el mercado negro.

Las pastillas utilizadas como abortivas crean una fuerte contracción en el útero que hacen expulsar el feto enmascarando un resultado similar al del aborto tras espontáneo. De hecho en diferentes foros que circulan por la red, recomiendan no utilizarlas a partir de las 9 semanas de embarazo ya que pueden resultar peligrosas también para a vida de la persona que las toma por las fuertes hemorragias que originan y recomiendan en caso de producirse, avisar a un médico y ofrecer la versión de que tras realizar un gran esfuerzo la embarazada se ha sentido indispuesta y le ha sobrevenido el aborto.