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AGENCIAS
Viernes, 14 de septiembre 2012, 15:15
En Aparecida, una pedanía de Orihuela, los niños siguen de vacaciones. Y no porque quieran, esta es la única forma que los padres de los pequeños han encontrado para protestar por la reducción de líneas de autobús para ir al colegio. Protestan porque de 4 líneas que tenían, se han quedado en 2 y muchos niños tienen que andar hasta 3km para llegar al centro. Además el camino pasa por carreteras peligrosas, como la nacional 340 con mucho tráfico y con algunos sitios incluso sin aceras ni arcén para que anden los escolares. De momento ya son 3 días sin acudir a las clases y seguirán así hasta conseguir su objetivo, que es volver a tener autobús para todos.
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