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E. B.
Miércoles, 10 de septiembre 2014, 01:55
La Fapa Gabriel Miró de Alicante ha recopilado las quejas transmitidas desde los centros educativos y, además del calor, la falta de profesorado ha sido una constante. La provincia ha sido más castigada en este déficit de docentes respecto a Valencia y Castellón.
Según el presidente de la Fapa, Ramón López, de las 486 plazas sin cubrir en la Comunitat a fecha del pasado 5 de septiembre, el 52,02% de las bajas eran de centros de la provincia, frente al 27,37% de Valencia y el 20,58% de Castellón.
En el caso del cuerpo de Maestros la situación se repetía con un 56,3% de vacantes sin sustituir en Alicante, 23% en Castellón y poco más del 20% en Valencia. En profesores, una vez más los porcentajes variaban desde los 47,46% de la provincia, a los 32,72 de Valencia y menos del 20% en las aulas de Castellón.
Esta situación, a juicio del responsable de la Fapa, muestra el déficit de docentes, con muchos interinos sobre todo en la Vega Baja, lo que, además provoca una inestabilidad en las plantillas y en los proyectos educativos. «El problema es que una escuela no es una empresa que crea un producto. Estamos hablando de alumnos y algún día nos pasará factura».
Con estos datos, el curso educativo ha comenzado con el mismo problema de docentes pese a adelantarse al 3 de septiembre, aunque su incidencia no ha sido elevada.
En el tema de libros, desde la Fapa se recordó que en muchos centros se ha decidido finalmente cambiar todo el material por la entrada de la Lomce en 1º, 3º y 5º de Primaria. Algunos centros, por contra, han apostado por la reutilización pero esta actuación no han sido mayoritaria.
La federación cuenta con un banco de libros para el intercambio, que está «funcionando muy bien» en Elda, Benidorm Alicante y Torrevieja y el objetivo que se persigue es alcanzar convenios con la Diputación y la Federación de Municipios y Provincias para dar cobertura a los municipios de menos de 20.000 habitantes y que tengan una infraestructura. Un objetivo que se persigue cara al próximo curso escolar.
Sobre las quejas de las altas temperaturas, López lamentó que las altas temperaturas hayan centrado el debate del arranque del sistema educativo cuando «vivimos en una Comunidad donde la mayoría de días hace calor». Aún así, desde la Fapa se dejó claro que ya hace tiempo que «venimos diciendo que los centros» no estaban preparados y no se construían teniendo en cuenta la realidad de la provincia, es decir, sin aire acondicionado.
«Están mal diseñados y orientados», señaló López, al tiempo advirtió de que no se utilice el tema del calor con otros intereses, al igual que alertó a los padres de «su buena voluntad para que luego no les pase factura».
El responsable de la Fapa se refirió a casos de padres que llevan ventiladores y que se están ofreciendo para realizar pequeñas instalaciones. «Eso es un peligro; lo hacen con una buena intención pero puede haber, por ejemplo, una sobrecargar en el centro».
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