El PSPV pide una revisión integral de la tubería del trasvase

El secretario general del PSPV-PSOE provincial de Alicante, David Cerdán, considera que dos roturas en las canalizaciones de agua del Trasvase Tajo-Segura en menos d e un mes (tal y como avanzó ayer este periódico) comienza a ser un «síntoma muy grave de que algo va mal ante la pasividad de las Administraciones». Tras la nueva pérdida de agua producida anteayer, los socialistas reclamarán a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) que revise de manera integral toda la canalización del trasvase para que no se vuelva a perder una gota de agua.

Cerdán calificó de «dramático» cada litro de agua que se pierde del trasvase. «Cada litro de agua es una oportunidad perdida para la Vega Baja y para la provincia de Alicante. Y no estamos para perder oportunidades, sino para aprovechar todas al máximo», relata.

Los socialistas consideran esencial el aprovechamiento de todos los recursos, porque «si no es así, perdemos legitimidad para reclamar agua de otras regiones, de otras fuentes y recursos». Desde el PSPV-PSOE provincial se afirma que «si venimos reclamando la reutilización de las aguas depuradas al máximo, no tiene sentido que los recursos que son fruto de la solidaridad y del principio de justicia se pierdan por un agujero».

Desde su punto de vista, hay que actuar especialmente en el tubo que cruza la Vega Baja, porque los vecinos de la zona tienen muy claro cuáles son los puntos que pueden reventar en breve. «Por lo tanto, los equipos técnicos de la Confederación también lo deben de saber y actuar de manera preventiva», añade.

Límite peligroso

El secretario general alerta de la necesidad de extremar todas las medidas que aseguren que el agua del Tajo es aprovechada al máximo en todos y cada uno de los municipios y los campos de la Vega Baja. «Un cuidado exquisito ahora que las reservas se acercan peligrosamente al límite establecido por el Gobierno, en contra de la postura socialista, de los 400 hectómetros cúbicos. Si supera por abajo este límite, la capacidad de trasvase será muy limitada», añadió en alusión al nuevo Plan Hidrológico del Tajo, vigente desde hace unos meses.

Como adelantó este periódico ayer, el tubo que lleva el agua del trasvase Tajo-Segura por Orihuela ha registrado una nueva rotura, la segunda en un mes después de la que tuvo lugar a mediados de noviembre. En esta ocasión, el tramo afectado, del que salieron miles de litros de agua desde primeras horas de la tarde del martes, está cerca del primer escape, en el barrio oriolano de Lo Cabello, un grupo de casas ubicadas junto a la carretera que conecta en paralelo la pedanía de Desamparados con la de Arneva. Los hechos se produjeron en torno a las tres y media de la tarde cuando algunos de los vecinos que tienen las casas cercanas al acueducto y a las obras del tendido de la alta velocidad se percataron de un ruido «muy fuerte que no sabíamos a qué se debía», comentó uno de los residentes. Fuentes de la CHS dijeron que la pérdida de agua es habitual en una tubería que cuenta ya con 38 años, sobre todo cuando cambia el clima y el frío o el calor dilatan las juntas de las tuberías.