El líder del PP no ignora a Fabra, pero tampoco le confirma como candidato a la Generalitat

Los integrantes de AVE no le preguntaron a Rajoy por la candidatura de Alberto Fabra como cabeza de cartel del PPCV a la Generalitat. «Eso lo damos por descontado», aseguraron fuentes empresariales. «Se ve la sintonía que hay entre ambos». Desde el Palau indicaron que Rajoy, en privado, tampoco comunicó nada a Fabra.

Las mismas fuentes oficiales señalaron que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, no hubiera venido el pasado sábado si no hubiera un interlocutor válido. Y el hecho de que ayer Rajoy estuviera acompañado por Fabra es su manera de «dar cariño» al jefe del Consell. De todos modos, indicaron que si Rajoy reúne el comité ejecutivo del partido el próximo día 16, puede ser que sea en esa jornada cuando se desvelen los candidatos.

Cuando no hay palabras hablan los gestos. Y más cuando se está a la espera de que en público se produzca una palmada en la espalda, un abrazo, o simplemente una consulta cómplice.

El presidente del Gobierno y del PP, en público, estuvo hablando distendido con la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y con el presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus. De hecho, antes de iniciarse los discursos tras visitar la planta de Ford, Rajoy intercambió palabras tanto con Rus como con Barberá. La alcaldesa estaba sentada justo detrás del presidente del Gobierno y el presidente de la Diputación de Valencia, a la izquierda de la alcaldesa. El titular de la Generalitat, Alberto Fabra, estaba situado a la derecha de Rajoy, aunque entre ellos se encontraba el presidente mundial de Ford, Mark Fields.

Al finalizar el acto, Rus saludó al jefe del Consell y a renglón seguido, y sin Fabra presente, el presidente del Gobierno se acercó hacia al dirigente provincial del PP valenciano. Rajoy posó sus manos a la altura de los hombros de Rus y ambos estuvieron charlando un par de minutos. El presidente del Gobierno mostraba una sonrisa evidente durante este breve encuentro. Rus no ofrecía menor satisfacción, al tiempo que se cercioraba de la calidad de la tela del traje del presidente. «Alfonso, estáte tranquilo que esto va hacia arriba», aseguraron fuentes cercanas a Rus que le comentó el presidente.

«Tengo mucho 'feeling' con Mariano Rajoy», afirmó entre chanzas el dirigente provincial de los populares valencianos antes de abandonar la factoría automovilística. No en vano, Rajoy apadrinó a Rus cuando se afilió al PP a principios de la década de los 90.

Si por gestos fuera, el presidente nacional del PP no ignoró al del PPCV. Mantuvo una posición correcta. En la reunión previa con los responsables mundial, europeo y de España a la visita de la factoría, Rajoy sentó a su lado a Alberto Fabra. Luego, durante el recorrido por la fábrica, Fabra se mantuvo en un segundo plano. Y cuando, ya en el acto público, Mark Fields subió al estrado para ofrecer su discurso -estaba sentado entre Rajoy y Fabra- el presidente del Gobierno se inclinó hacia el jefe del Consell para realizarle un comentario. Por otra parte, Rajoy, de acuerdo con varios asistentes al acto, reconoció que los valencianos están mal financiados y que si por él hubiera sido en 2015 ya estaría resuelta la infrafinanciación, pero no hay dinero para resolverla ahora y se comprometió a que la reforma estará terminada en 2016.