Cano se quedará sin firma hasta que concluya su proceso judicial

Ciudadanos puso dos condiciones para llegar a un pacto con el PP: apartar a José Císcar, por su, según ellos, mala gestión como vicepresidente de la Generalitat Valenciana, y a Bernabé Cano por su imputación por prevaricación. Finalmente, el acuerdo fraguó tras renunciar Císcar a ser presidente, ya que el alcalde de La Nucía se quedará en la Corporación, aunque sin firma, ni posibilidad de manejar presupuesto ni dedicación exclusiva hasta que no finalice su proceso judicial. «Como un diputado raso», explicó el coordinador de Ciudadanos, Emigdio Tormo. Si es absuelto, podrá tener plenas competencias; de lo contrario, deberá abandonar la Corporación Provincial, según el pacto suscrito ayer por ambas partes.

En declaraciones posteriores a la firma del acuerdo, César Sánchez dijo que éste es un tema que tienen que «trabajar» aún, aunque recalcó la postura de su partido de que un imputado por «prevaricación administrativa no tiene que abandonar sus cargos ni en el gobierno ni en el partido».

Tanto Cano como Císcar estuvieron presentes a la rúbrica del acuerdo entre ambas formaciones. También estuvo presente el concejal alicantino Carlos Castillo, que ocupará el lugar del presidente provincial del PP en la Diputación.

Sobre el veto a Císcar, el coordinador provincial explicó que era una de las «líneas rojas» de su formación por la gestión del presidente popular en la Generalitat Valenciana. Por el contrario, los «datos razonables en la gestión de Calpe» le han permitido obtener a César Sánchez el visto bueno de la formación naranja.