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E. M. L.
Martes, 28 de julio 2015, 01:00
El grupo municipal del PP obligará al tripartito a pronunciarse el jueves sobre su opinión acerca del trabajo participativo que dio lugar a las alegaciones municipales Actuación Territorial Estratégica (ATE) de Rabasa. Un trabajo en el que se recabaron informes y dictámenes de distintos departamentos municipales y de los consejos consultivos de la ciudad.
Ahora, el PP pregunta al tripartito si quiere tirar a la basura todo este trabajo. En concreto, «si mantiene o rechaza el apoyo a los informes y dictámenes emitidos por unanimidad por los consejos consultivos de la ciudad sobre la ATE» y que «el PP hizo suyas, íntegramente, desde el gobierno municipal» que ostentaba. A su juicio, debería respetarse el trabajo y las opiniones unánimes de la ciudad sobre el proyecto. Consideran, como han manifestado en varias ocasiones, que lo correcto es mantener la ATE pero exigir que se adapte a estas alegaciones.
Sin embargo, el tripartito tiene otros planes. Como ya anunció que haría, llevará a Pleno dos declaraciones institucionales contra la ATE. La primera pide directamente al Consell la retirada definitiva de este proyecto para tramitar únicamente el parque tecnológico y dentro del Plan General de Ordenación Urbana y «negociar» con Ikea su ubicación en la ciudad.
La segunda solicita a la Generalitat la protección de las Lagunas de Rabasa, los Saladares de Fontcalent y de La Serreta, las Lagunas de Fontcalent, la Balsa de Orgegia y el cauce del río Monnegre. Solicitan que se incluyan en el Catálogo de Zonas Húmedas y en el Plan Hidrológico del Júcar. Demandan, además, la exclusión de las Lagunas de Rabasa de la ATE.
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