Retira la demanda por la limpieza de colegios y facilitará el rescate

El empresario Enrique Ortiz aseguró ayer durante la reunión con la Corporación municipal que ya ha ordenado que se retire la demanda que interpuso contra el Ayuntamiento por haberle denegado la prórroga del contrato de limpieza de colegios y dependencias municipales. Ortiz había reclamado al Ayuntamiento que le remitiese un escrito confirmando que la empresa cobraría por el servicio hasta que deje de prestarlo, ya que sigue haciéndolo mientras se decide si se volverá a sacar a licitación o se rescatará.

El Consistorio le ha remitido este escrito de garantía y, a cambio, la empresa ha retirado la demanda. Además, el tripartito reclamó una rebaja del precio del servicio del 5%, que entiende que también se va a producir. Ortiz se comprometió, asimismo, a facilitar el traspaso de la contrata, incluidos trabajadores y material, al Ayuntamiento, si decide rescatarla, una vez que finalicen sus servicios.

Llegó a decir incluso, según el equipo de gobierno, que el empresario está conforme con esta municipalización y con otras que también le afectarían, como la del mantenimiento del Cementerio, ya que lo prefiere a que le den el contrato a otra empresa.

El portavoz del tripartito, Natxo Bellido, señaló en este sentido que la intención del Ayuntamiento sigue siendo municipalizar ambas contratas, y que la del Cementerio es de esperar que se rescate pronto, porque apenas hay trabajadores que subrogar. En el caso de la de limpieza de colegios y dependencias municipales, llevará algo más de tiempo. Bellido reconoció que lo más probable es que la tengan que sacar a licitación durante un año, hasta que acaben las limitaciones del plan de ajuste. Si es que finalmente no logran quitárselas de encima.

Hablaron también de la contrata de limpieza y recogida de residuos, la mayor que ostenta Ortiz, en este caso en UTE con otras dos empresas. En este caso, se puso como ejemplo la voluntad de colaborar con el Ayuntamiento para mejorar el servicio, que se ha cristalizado en un plan de choque que ya está sobre la mesa.

El empresario aprovechó este asunto de las contratas para mostrar su buena disposición a colaborar. Aseguró que no quiere ser «un problema» y que se apartará de todo aquello en lo que «moleste». Todos sus esfuerzos se centraron en intentar que el Ayuntamiento no le vea «como enemigo», sino como «aliado».