Labradores, San Cristóbal, Gabriel Miró y Castaños, los siguientes

El plan de ordenación de la Explanada es el primero que el equipo de gobierno aprobará para racionalizar la ocupación de la vía pública con veladores. El objetivo, destacan desde Urbanismo, es «garantizar el paso peatonal y compatibilizar las zonas de ocio y descanso».

Este primer plan no ha venido acompañado de polémica, dado que apenas supone modificaciones respecto a lo que ya se diseñó en la pasada legislatura, de cara a las obras que se ejecutaron en ese tramo de la Explanada. El diseño actual de los veladores ya forma parte del nuevo planeamiento y ordenación que se le quiere dar a la zona. De hecho, fue el Ayuntamiento el que sufragó el coste de las nuevas pérgolas, en sustitución de cerramientos más extremos y dispares.

A este plan, le seguirán otros dos planes iniciados en la anterior legislatura al igual que el del tramo noreste de la Explanada: el de la calle Labradores y el de la plaza de San Cristóbal, que han sido revisados por el actual equipo de Gobierno, y que ya han sido presentados a colectivos vecinales del Casco Antiguo.

Tras esos tres planes que afectan a espacios del Casco Antiguo se tramitarán y aprobarán dos planes que afectan a espacios del Centro Tradicional: el de la plaza de Gabriel Miró y la calle Castaños.

En estos casos, sí que es más probable que se genere cierta polémica con los locales de ocio ubicados en estos emplazamientos, dado que el Ayuntamiento ya ha anunciado que su intención es reducir el número de mesas y sillas de estos espacios peatonales, para conceder más espacio al tránsito.

En Labradores y Castaños, los vecinos han pedido en varias ocasiones que se quiten veladores.