Coepa pide ampliar la concesión de Babel pero el alcalde no lo ve claro

El futuro de la patronal alicantina Coepa, la principal confederación empresarial de la provincia con 37 años de historia y de negociación colectiva y representación institucional, sigue en el aire. Sobre todo, después de que ayer el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, asegurase que «no ve claro» la ampliación de la concesión de la parcela municipal del barrio de Babel sobre el que se construyó el polémico centro de oficios.

Esa es la propuesta que, para poder retornar el crédito de 3 millones de euros al IVF mediante una refinanciación, trasladaron algunos trabajadores de Coepa al alcalde ayer y algunos directivos en una reunión que tuvo lugar el pasado viernes, como también desveló Echávarri tras el encuentro. Esa o la dación en pago o la compra por la Generalitat, que un día antes fue de nuevo rechazada, en una entrevista a Efe, por el director del IVF, Manuel Illueca, el cual insiste en que el organismo de la Conselleria de Hacienda está obligado a recuperar el dinero público prestado y seguirá adelante, hasta el final, con la demanda de embargo que se tramita en los juzgados alicantinos de Primera Instancia, pese al preconcurso de acreedores en el Juzgado Mercantil.

Echávarri dijo que en lo que respecta al Ayuntamiento no ve estas alternativas «muy claras» porque supone «inyectar dinero público» y añadió que buscarán «el beneficio de la globalidad de la ciudad». Asegura que ha dado traslado al interventor municipal para que lo estudie y, en su caso, decida si es legal, «pues hay un contrato firmado y supondría que todos los alicantinos cedan parte de su patrimonio para salvar una institución privada», en alusión a la ampliación de la cesión de suelo.

Echávarri se solidariza con la situación «angustiosa» de la plantilla que lleva desde hoy cinco meses sin cobrar, tal y como adelantó este diario. Los representantes de la plantilla (algunos de los cuales achacaron a Echávarri en las redes sociales ser el culpable del posible cierre de Coepa y del fin de sus puestos de trabajo) le trasladaron ayer al alcalde que responsabilizan «a partes iguales al Ayuntamiento, Generalitat y la propia Coepa», pero el primer edil asegura que «se debe a la mala gestión de otros».