Los portavoces de la oposición se coordinan para fiscalizar la labor de César Sánchez

Los cuatro grupos de la oposición en la Diputación Provincial (PSPV, Compromís, Ciudadanos y EU) se reunieron ayer por la tarde con el objeto de «estructurar estrategias concretas que sirvan para fiscalizar» la acción del gobierno provincial, ahora en minoría tras romper Ciudadanos el pacto de investidura firmado el pasado julio por el nombramiento de Bernabé Cano y Agustín Navarro, imputados por delitos administrativos.

La reunión se celebró a petición del portavoz de Compromís, Gerard Fullana, en la oficina de la agrupación socialista en la calle Tucumán. Si bien no se ha llegó a ningún acuerdo concreto, la reunión sirvió para «abordar aspectos destacados de la institución», según declaró el portavoz de Compromís, Gerard Fullana.

Por su parte, el portavoz del grupo socialista, José Chulvi, afirmó que «debemos de aprovechar la nueva situación en la Diputación para mejorar su funcionamiento y hacerla más útil para los pueblos ciudades de la provincia».

«Ha cambiado la mayoría en la Diputación y es preciso valorar de manera conjunta la nueva situación», explicó el socialista.

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos en la institución, Fernando Sepulcre, también participó en la reunión, aunque por la mañana había dejado abierta una puerta al Partido Popular: «Si se apartara a los dos (diputados imputados) se volvería al pacto, porque nosotros, ante todo, lo que firmamos lo llevamos hasta el final. Pedimos la revocación de los dos, no de uno. Si se aparta a los dos, como si nada, continúa el pacto», indicó.