Apartada y solo con un minuto de intervención

Nerea Belmonte inauguró la condición de concejal no adscrito en el Ayuntamiento de Alicante, lo que ha provocado en los últimos días no pocos quebraderos de cabeza. La edil se desplazó de sitio desde las bancadas del equipo de gobierno al de la oposición, entre Juanfran Escudero (Ciudadanos) y Marisa Gayo (PP).La Junta de Portavoces acordó dejarle un minuto de intervención frente a los cuatro del resto de grupos, no sin polémica, puesto que querían rebajárselo aún más. Aprovechó uno de sus tres minutos (uno por cada intervención) para convertirse en protagonista, si no lo era ya antes.