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E. M. L.
Viernes, 2 de diciembre 2016, 01:02
Uno de los motivos que ha encendido la mecha de las movilizaciones por parte de los trabajadores de la contrata de limpieza de colegios y dependencias son las declaraciones del alcalde, Gabriel Echávarri, en las que dejaba caer que están frustrados porque tenían esperanzas de convertirse en funcionarios. «Estas declaraciones son una vergüenza, intenta desviar el tema hacia la intentona de municipalización, cuando desde nuestro sindicato teníamos informes, ya antes que ellos, que demostraban que era inviable», expone la delegada del SEP en el comité de empresa Mercedes Rubio.
«Nosotros no aspiramos a ser funcionarios, de hecho, muchos no querían la municipalización porque eran conscientes de que tendrían que hacer exámenes que quizá no estaban ya en condiciones de pasar», recalca la sindicalista.
Para Rubio, el problema es que «las condiciones que se establecen en el pliego nos abocan a más recortes como los que venimos sufriendo desde 2003». En una situación que ya de por sí, asegura, «es muy precaria en algunas ocasiones».
Como ejemplo de estas condiciones y de la actitud del Ayuntamiento, Rubio ironiza con que «luego se les llena la boca con la lucha por la conciliación laboral, pero debe de ser solo para los trabajadores de El Corte Inglés, porque yo tengo muchos compañeros que trabajan todos los domingos y festivos y no veo que peleen por mejorar su situación».
Asegura que el equipo de gobierno «no deja de resaltar que no tiene una relación laboral con nosotros, que dependemos de la empresa, pero ahora es el momento de imponer las reglas del juego y tampoco quiere hacerlo».
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