Un proyecto muy ambicioso que se quedó a medio terminar

El Ayuntamiento de Alicante no ahorró en detalles y prestaciones en la construcción de la Casa del Fuego de Ildefonso Prats.

Está situada en las plantas inferiores de un edificio con una torre de 30 metros de altura, que alberga además un laberinto para realizar prácticas y maniobras. Tiene un total de 892 metros y está construida en tres plantas y un sótano, con un total de seis estancias. La superficie baja simula un garaje para trabajar con fuego en vehículos, que es donde se realizaron las primeras demostraciones, un trastero con un armario con contadores y una cocina industrial. En la planta baja hay dos locales: uno simula un comercio y otro, un almacén. En la primera planta hay una vivienda con tres habitaciones: cocina, habitación con dos literas y un salón.

Todas las estancias cuentan con un complejo sistema que permite que ardan en incendios simulados, controlados con varias fases y tiempos de activación del fuego a través de un puesto de control que está informatizado. De esta forma se pueden controlar los tiempos de extinción y el manejo de los bomberos de los distintos materiales.

Está controlada por un sistema de seguridad y una central de ordenadores, de tal forma que podrían apagar el simulacro en cuestión de segundos. Los bomberos van monitorizados cuando realizan las prácticas para tener una mayor seguridad y control de la situación, y poder mejorar la eficacia de la extinción.

Las instalaciones también deberían contar con una poza de ocho metros de altura, situada en el patio de maniobras, en la que los buzos podrían realizar prácticas y ejercicios de agua controlados con una campana de seguridad, así como reflotar vehículos. Sin embargo, estas obras quedaron sin concluir y deberán ejecutarse en 2017 por el Ayuntamiento, en un proyecto que costará en total 2,6 millones.

La primera fase comprenderá las obras del edificio administrativo y la entreplanta del inmueble principal. En la segunda fase se concluirá el garaje, la piscina para prácticas de buceo y el gimnasio, el laberinto de humos y la poza.