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Martes, 5 de agosto 2014, 00:01
El alcalde de Vilamarxant, Vicente Betoret, no desaprovechó ayer la oportunidad de pedir ayuda a la Generalitat para combatir «la plaga que tenemos en la zona de Les Rodanes, que nos tiene muy preocupados». Al respecto, explicó que la montaña «cada vez se ve más amarillenta, los pinos se mueren probablemente por la sequía y pedimos que el Consell continúe ocupándose del tema para que no vaya a más». También reclamó que «se intente recuperar a base de reforestación los árboles que hayan muerto».
El president Alberto Fabra cogió el guante y anunció que los técnicos del departamento de Sanidad Vegetal de la Generalitat
«esta misma semana van a empezar a cortar los primeros pinos y a empezar a luchar contra esta plaga que tanto está haciendo para cambiar el paisaje». Fabra insistió en que el problema «es fruto de la sequía que tanto daño está haciendo a los pinos de la comarca».
Desde hace semanas, un buen número de ejemplares de pino se han secado en las inmediaciones de la citada zona, y las críticas contra la administración acerca de falta de mantenimiento del parque no se han hecho esperar. Sin embargo, parece que la sequía está detrás del problema.
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