Pueblos de la Ribera exigen mejoras en el transporte para ir al hospital

«Por una consulta en el hospital te puedes pasar toda la mañana o toda la tarde». María, una jubilada de Benimuslem, es un ejemplo de las múltiples quejas que varios municipios de la Ribera tienen respecto al modo en que desplazarse al Hospital Universitario de la Ribera. La escasa frecuencia de autobuses, uno que va y vuelve por la mañana y otro por la tarde, no es una conexión suficiente para vecinos como ella que carecen de medios para llegar al centro sanitario.

La propia alcaldesa de este pequeño municipio, María Antonia Vilar, pidió a la Conselleria de Transportes «que nos hagan más caso» para resolver este problema. Vilar es consciente de que la actual administración autonómica «se encontró una situación muy complicada, con contratos caducados», pero reveló la «preocupación» existente en municipios como el suyo y en otros como Gavarda o Antella.

Unos kilómetros más lejos del hospital, desde el Ayuntamiento de l'Alcúdia, afirmaron que el transporte es «un servicio básico» por el que están pagando unos 60.000 euros al año en forma de autobús que pasa en ocho ocasiones por el municipio, cinco de manera directa hasta el centro, por lo que la Generalitat «debería plantearse alguna medida».

Desde la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio recordaron que la necesidad de elaborar un nuevo mapa concesional deriva de que la inmensa mayoría de concesiones de servicios de transporte regular de viajeros en autobús se encuentran caducadas. El proceso «es largo porque el anterior Gobierno dejó unos proyectos que incluso empeoraban la situación existente», y la actual conselleria desea hacer un nuevo diseño de la red de transporte público con criterios de eficiencia y calidad que requiere «un tiempo de estudio y análisis que ya ha empezado».

La conselleria va a realizar un estudio para toda la Comunitat Valenciana que determine qué oferta de transporte es necesaria en cada comarca para, posteriormente, redactar los proyectos de servicio público que sean necesarios y que deberán someterse a información pública. Finalmente, deberán licitarse los correspondientes contratos de gestión. El contrato con la consultora que debe analizar la situación de las provincias de Castellón y Valencia se suscribió a principio de diciembre, por lo que ya están trabajando.

Así, se han organizado reuniones comarcales para que los técnicos de la conselleria recojan de los alcaldes implicados sus propuestas para mejorar el servicio actual.