Uno de cada cuatro valencianos soporta exceso de ruido por la noche

Uno de cada cuatro vecinos de Valencia está sometido a un exceso de ruido por la noche. Así lo recoge el mapa estratégico de ruido de 2017 que presentó ayer la concejal de Calidad Ambiente, Pilar Soriano. Según este informe, un 25,78% de los residentes en Valencia están expuestos a más de 55 decibelios en horario nocturno, que es el máximo recogido por ley. Por el día el número de vecinos afectados es del 13,09%, al soportar más de 65% de decibelios.

En el estudio anterior, los vecinos afectados por el ruido nocturno representaban un 28,60% y en horario diurno, un 13,84%. Por lo tanto, se ha reducido un 5% en escala logarítmica de base 10 durante el día y un 10% por las noches, según Soriano. Estas cifras recogen los ruidos ocasionados por el tráfico rodado, ferroviario o industrial, pero no el ruido de la actividad económica y las terrazas de bares.

Por distritos, los residentes más castigados son los de El Ensanche; Extramuros y Pla del Reial. Según indicó la edil se trata de zonas con «bastante tráfico y calles estrechas». Los distritos con afección media-alta son Campanar; Zaidía; Olivereta y Patraix. Y en horario nocturno, Quatre Carreres y Algirós.

Los distritos en los que los vecinos se ven afectados en un grado medio-bajo son Jesús; Algirós (durante el día); Benimaclet; Rascanya; Benicalap; Poblados Marítimos (por la noche) y Ciutat Vella. En este último caso, Soriano explicó que «las políticas de movilidad, con las peatonalizaciones, zonas 30, el anillo ciclista, la reordenación del tráfico y la mejora del transporte público, han permitido reducir la afección durante el día un 3% y por la noche hasta un 18%». En la calle María Cristina y la Lonja, Soriano indicó que en «2012 había entre 65 y 70 decibelios de día y ahora hay de 60 a 65 y por la noche, se ha pasado de entre 60 y 65 decibelios a una horquilla de 50 a 55 decibelios». Y en Serranos y Caballeros se ha pasado de entre 65 y 70 decibelios a de 2012 a 55 decibelios en 2017 durante el día y por debajo de 50 por la noche.

Sobre las medidas que impulsarán en breve, la concejal de Calidad Ambiental y la jefa de servicio de Contaminación Acústica, Ana Viciano, explicaron que se van a poner sonómetros en Ruzafa y mensajes gráficos para concienciar, como se ha hecho en las plazas del Tossal y dels Furs. Se está realizando a través de los proyectos participativos y se ha licitado por 205.000 euros. La edil también explicó que el aeropuerto está ultimando su mapa de ruido «y por primera vez ya marca que afecta a Valencia, concretamente a Malilla, Favara y Vara de Quart».

Soriano explicó que las distintas concejalías seguirán aplicando medidas como el uso de asfalto fonoabsorbente; el diseño urbanístico y de jardines que tengan en cuenta la merma del ruido o la peatonalización de calles. También reconoció que la medida pendiente es la insonorización de los túneles.