La doble crisis del San Pío V

El San Pío V regresa de las vacaciones de Semana Santa teniendo que gestionar dos crisis, una de puertas para fuera y otra para dentro. Prueba de la del exterior es la malla que ocupa gran parte de su fachada, con el fin de que no haya nuevos desprendimientos. No sería improbable que los hubiese. Porque ésta no ha sido la primera vez. Los técnicos trabajan en un informe para determinar la gravedad de la situación. En el Ministerio de Cultura no se ha tomado ninguna determinación aún sobre la posibilidad de alterar el plan de obras del museo y adelantar la intervención en la pared exterior. Fuentes del departamento que dirige Wert aseguraron ayer que se trabaja con diligencia para adoptar la decisión más acertada. Se espera que entre hoy y mañana el informe técnico, cual oráculo, despeje las dudas sobre el camino que seguir.

Por los cascotes no hubo que lamentar daños personales, pero sí han desatado otra crisis. O la han avivado más. La de la labor de la directora del centro, Paz Olmos, cuestionada desde que ocupó su cargo hace tres años. Ella ha tratado de gestionar el escollo desde el mismo jueves y ha acudido al centro durante los días festivos, aunque ya poco se podía hacer. Sólo quedaba esperar la opinión de los técnicos.

Algunos trabajadores reprochan a Olmos que no hubiese advertido e insistido de la urgencia de reparar la fachada cuando se diseñó el plan de obras que corresponde a la V fase de ampliación de la pinacoteca. Otros aseguran que desde el Ministerio ni siquiera se contó con su opinión a la hora de elaborar el calendario de rehabilitaciones.

LAS PROVINCIAS adelantó hace unos días que el método empleado para sustituir a la directora del IVAM, Consuelo Císcar, será al que también se recurra en el museo de Bellas Artes una vez finalicen las obras de ampliación, según confirmaron fuentes del Ministerio de Cultura y de la Generalitat, que coinciden en la necesidad de modernizar la elección de los cargos directivos de los museos valencianos. Después de que el departamento de Wert decidiese apostar por invertir en el San Pío V se planteó la necesidad de relevar a Olmos de su cargo. El incidente ocurrido hace unos días podría acelerar el proceso de sustitución, ya que la confianza en la actual responsable del museo está en entredicho.

Desde la Conselleria de Cultura, sin embargo, no se confirmaba ayer ninguna intención de acometer cambios inmediatos en la dirección del museo.

El Ministerio ya ha realizado varios gestos en los últimos meses para recordar que es el propietario de la pinacoteca y tiene intención de tomar el control de nuevo. Hace unas semanas el departamento comunicó el levantamiento de 98 obras que se guardaban en el Monasterio de El Puig. El Gobierno exigió que volviesen a las dependencias del centro dos piezas restauradas sin permiso de los técnicos del museo, otras 15 piezas trasladadas a la parroquia y que no se exponen y otras 81, localizadas en el monasterio, pero ocultas al público.

Una denuncia de UGT fechada en mayo de 2013 aireó el asunto, cuestionó la desaparición de 18 obras y causó la imputación de Paz Olmos por posible delito contra el patrimonio. Sin embargo la Fiscalía solicitó el archivo de la causa abierta contra la directora del Bellas Artes.