Un Consell dividido, deudas millonarias y un futuro incierto

Los actos del centenario llegan con el futuro de la institución en el aire. Hace cuatro años que se inició un proyecto de reconstitución que el equipo ferial acordó con los anteriores gobiernos autonómico y municipal y ratificó con los actuales, pero lo cierto es que las últimas semanas la Conselleria de Economía, de Compromís, se resiste a aceptar un acuerdo que en Hacienda, del PSPV, pensaban cerrado. Aunque ambas están de acuerdo en que la Generalitat cargue con los más de 1.000 millones de deuda de la institución, los primeros se opone a que vuelva a ser privada, como antes de la crisis. Para desatascar la situación desde el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) se ha propuesto un juicio salomónico: que se queden bajo el control de Economía las ferias que ya existen (Cevisama, Habitat...) y la nueva sociedad privada sólo gestione el recinto y cree nuevos certámenes. El problema es que para esta futura sociedad se quiere un socio privado que sepa de ferias y aporte un 51% o un 60% del capital. No faltan voces que alertan de que estos vaivenes espantan a los aspirantes, lo mismo que las constantes acusaciones desde el ámbito político contra la gestión y los gestores de la institución, aunque la fiscalía no viera nada punible en su actuación.