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Miércoles, 1 de junio 2016, 02:01
El president de la Generalitat, Ximo Puig, se refirió ayer a una de las mociones aprobadas en el Pleno del Ayuntamiento ilicitano en apoyo de la escuela concertada. Una propuesta que contó con los votos en contra de los grupos municipales del PSOE y Compromís. Puig aseveró que en el tema educativo «se actuará de acuerdo con la ley» y advirtió de que los colegios concertados que la cumplan «no tendrán ningún problema».
Además calificó como «manifestaciones preventivas» las críticas y protestas que se han producido en las últimas semanas por parte de la escuela concertada hacia la política educativa de la Generalitat. Y defendió que, en el cómputo global, no se han cerrado aulas, al tener en cuenta que hay un menor número de alumnos.
Quiso dejar claro que «no ha habido ninguna discriminación» a la educación concertada, pero consideró que en el pasado «sí hubo tal discriminación y desprecio absoluto a la escuela pública», una situación que, afirmó, «se ha acabado». Resaltó que la prioridad del Consell ahora es «restablecer» la dignidad de la escuela pública.
El jefe del ejecutivo valenciano realizó estas declaraciones durante su estancia en la Universidad Miguel Hernández, momentos antes de dirigirse al Parque Empresarial, donde realizó una visita al centro productivo de Pikolinos, Pikokaizen, y a Tempe, filial del grupo Inditex que tiene previsto ampliar sus instalaciones, para lo cual el Ayuntamiento ha iniciado la tramitación de una nueva fase de esta área industrial".
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