Ejercerá de portavoz popular en el próximo debate de investidura

El anuncio más significativo de los que realizó ayer Alberto Fabra, tras anunciar que no optará a la reelección en el próximo congreso del PP valenciano, fue el de que sí será portavoz parlamentario de su partido. El aún jefe del Consell anunció públicamente que ejercerá esa función con el arranque de la novena legislatura -asumiendo por lo tanto que sí que tomará posesión de su escaño- y que será el portavoz en el debate de investidura del nuevo presidente del Consell -en el que él ejercerá de portavoz de su partido-.

¿Y portavoz, hasta cuándo? Fabra no aclaró si pretende mantener la portavocía ni durante cuánto tiempo. Fuentes de su entorno dieron por hecho que la intención del presidente de los populares valencianos es la de ejercer ese puesto mientras se prolongue el traspaso de poderes al nuevo Gobierno.

La decisión de Fabra es llamativa, y muchos dirigentes no terminaron de entenderla ayer. El análisis de que el PPCV está obligado a hacer autocrítica y a no perder ni un sólo minuto en dedicarse a hacer oposición saltó por los aires con el anuncio del aún jefe del Consell. «Es un error absoluto ser el portavoz en el debate de investidura», sentenció una voz autorizada del partido.

Que Fabra ejerza de portavoz en el primer debate importante de la nueva legislatura -y que tendrá lugar previsiblemente a finales de junio o a principios del de julio- anula cualquier posibilidad de ofrecer una imagen de renovación a la ciudadanía desde el primer momento. «No puede asumir el papel de líder de la oposición después de la debacle que ha sufrido», se consideró ayer.

La condición de portavoz en el debate de investidura sí que le convierte, inicialmente, en el líder de la oposición. Un papel inédito para un expresidente del Consell. Hasta la fecha, quienes habían ejercido esa responsabilidad habían optado bien por abandonar Les Corts tras dejar el cargo -caso de Eduardo Zaplana y Joan Lerma- bien por permanecer en un discreto segundo plano, como Francisco Camps. La decisión de Fabra da todo el protagonismo al expresidente en el inicio de la nueva legislatura. «Le ha regalado el debate al futuro presidente», se sentenció.

Entre las voces críticas en el seno del PP con la decisión de Fabra, alguna cuestionó también que el argumento para justificarla pueda ser la de continuar como diputado durante el traspaso de poderes. «Es que no tiene nada que ver una cosa con otra», se señaló. Si Fabra protagoniza el traspaso de poderes, también será el primer presidente del Consell que participe en un hecho así.

En su intervención de ayer, además, Fabra no aclaró exactamente si, con independencia del tiempo que ocupe la portavocía del grupo parlamentario, mantendrá su escaño en el Parlamento autonómico durante toda la legislatura. Algunas fuentes daban por hecho ayer que Fabra pretende formar parte de la candidatura del PP en las elecciones generales del próximo mes de noviembre.