«Cada zona tiene que ser capaz de tratar sus propios residuos»

En referencia a la gestión de los residuos, Julià Álvaro reconoció que el problema de la basura en la Vega Baja se ha convertido en uno de los «agujeros negros» de la Comunitat e indicó que hay que empezar a adoptar medidas para solucionarlo. La primera es la búsqueda de un lugar donde establecer la planta de transferencia, que el secretario autonómico recordó que «no es un vertedero» sino un lugar en el que la basura está apenas unas horas antes de partir camino de su destino final. Este es el punto en el que se encuentra el Consorcio del Plan Zonal constituido hace apenas unas semanas, aunque a partir de ahí habrá que ponerse a trabajar para acabar con la instalación de una planta de tratamiento en algún punto de la Vega Baja porque «cada zona tiene que ser capaz de tratar sus propios residuos», indicó el responsable autonómico, quien añadió que «no se puede esperar que vayan a otras comarcas y vertederos que están llenos, lo que genera dificultades y molestias a los habitantes de esas zonas y el hecho de que sus alcaldes estén en 'pre-pie' de guerra».

Preguntado sobre si la Conselleria de Medio Ambiente va a tomar alguna medida para agilizar los trámites que acaben con la consecución de un nuevo Plan Zonal para la comarca, Álvaro precisó que la administración autonómica no tiene capacidad ejecutiva en la gestión de la basura, pero demandó a los ayuntamientos que se pongan de acuerdo cuanto antes «porque si hay algún problema van a ser ellos los que tengan que pagar». No obstante y una vez se constituyan todos los consorcios de la Comunitat, la conselleria pondrá en marcha una cooordinadora de los mismos que realizará una labor de arbitraje e instará a que den los pasos necesarios para llegar a una gestión correcta de la basura.