El comité de garantías del PP podría tratar la elección de Bonig

La junta directiva regional del PP valenciano ratificará, previsiblemente la próxima semana, el nombramiento de Isabel Bonig como secretaria general de los populares de la Comunitat. Esa es la previsión con la que trabaja la cúpula del partido tras el pacto alcanzado entre Alberto Fabra, Rita Barberá y los tres presidentes provinciales para sustituir a Serafín Castellano.

¿Significa eso que el debate abierto respecto a la validez de su nombramiento está resuelto? No lo parece. Militantes de base del PP valenciano estudian la posibilidad de denunciar ante el comité de derechos y garantías del PP la designación de la consellera de Infraestructuras como nueva número dos del partido. El fondo de la polémica tiene que ver con el contenido de los estatutos del partido, y la referencia que se hace a que el secretario general del partido debe elegirse de entre el grupo de 22 vocales que componen el comité ejecutivo regional. Bonig no forma parte de ese grupo, y la fórmula elegida por la calle Quart para resolver ese problema -incorporarla a la dirección a través de los cinco de designación directa del presidente-, no resuelve todos los problemas. En 2009, sin ir más lejos, César Augusto Asencio asumió las funciones de secretario general en sustitución de Ricardo Costa, y a las dos semanas fue relevado del cargo precisamente por esta circunstancia.

¿Genera inquietud esta posibilidad en la cúpula del PPCV? Más bien poca. La dirección regional de los populares cuenta con el visto bueno de Génova para que Bonig ocupe este puesto. Dicho de otro modo, el árbitro encargado de pronunciarse sobre la existencia de irregularidades en la designación de la consellera ya ha dicho que no existen.