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F. RICÓS
Jueves, 5 de noviembre 2015, 00:05
Si Mònica Oltra y Enric Morera fueran contrincantes en una partida de truc, la actual vicepresidenta del Consell y figura referente de Compromís habría ganado a su secretario general y presidente de Les Corts con la jugada total, bien por ir de farol o por contar con lo mejor de la baraja en su mano: 'joc fora' -para los practicantes de mus, un órdago a la grande-. Quien gane la mano del 'joc fora' se lleva las piedras que le restan para ganar la partida. El premio, lo que la líder de Compromís quería: que su coalición concurra a las próximas elecciones generales del próximo 20 de diciembre.
El truc es un juego para listos y Oltra ha demostrado con creces que lo es. Y no ha sido esta la primera ocasión en la que la dirigente se ha impuesto al máximo responsable de la coalición. Desde 2011 Oltra ha tensado la cuerda cuando le ha interesado y se ha impuesto en las cuatro ocasiones en las que ha echado un pulso a Morera. Cuatro 'jocs fora' en otras tantas partidas.
La primera fue en 2011, ante las elecciones autonómicas y municipales. El Bloc, el partido referencia de Compromís -acapara un 60% del peso de la coalición- no quería como número dos por Valencia a nadie de Iniciativa, el partido de Oltra. Tampoco quería a un cabeza de lista de Iniciativa por Alicante. Oltra fue la número dos, incluso compartió cartel electoral con Morera, y Mireria Mollà fue elegida diputada como número uno por Alicante. Esa legislatura se cerró con Oltra como estrella de Compromís.
La segunda ocasión fue por el reglamento de las primarias de cara a las autonómicas de 2015. En el verano de 2014 Oltra ya anunció que optaba a encabezar la candidatura. Morera no se decidía. El reglamento de las primarias tardó año y medio en prepararse para que la mayoría de Bloc no cortara el paso a la minoría de Iniciativa y a Gent per Compromís. Oltra fue cabeza de lista con el secretario general del Bloc como número dos.
La tercera vez que se impuso Oltra fue a la hora de nombrar a los miembros del Consell que le tocaban a Compromís el pasado mes de junio. El Bloc quería a Pere Mayor, histórico del nacionalismo, como conseller de Economía, y a Gracia Jiménez, otra nacionalista, al frente de Educación. Mayor no fue conseller y Vicent Marzà, otro miembro del Bloc pero muy cercano a Oltra, es el titular de Educación.
El cuarto pulso que Oltra ha ganado a Morera ha sido por el pacto electoral con Podemos ante los comicios generales del próximo 20 de diciembre. Enric Morera planteaba ya el año pasado la posibilidad de poner en marcha una plataforma liderada por Compromís, junto a partidos de izquierda, pero de obediencia valenciana, para explorar la posibilidad de crear grupo parlamentario propio en el Congreso. Oltra buscaba, en su alianza con los pupilos de Pablo Iglesias, sumar más votos que el PSPV y fortalecer su posición política en el Consell ante los socialistas de Ximo Puig.
La técnica de tensar la cuerda y advertir el pasado lunes, al filo de la campana, de que Iniciativa se podría presentar a la cita electoral por su cuenta motivó que las bases del Bloc, que en septiembre se negaron mayoritariamente al pacto con Podemos, diesen el pasado martes su visto bueno, con Enric Morera jaleando a los suyos desde las redes sociales para que respaldaran el pacto. Se pronunció algo menos de la mitad del censo del Bloc, 1.273 militantes. Un 75,6% dijeron que sí y 301, no.
Oltra felicitó ayer al Bloc por su apoyo mayoritario y celebró la resolución a última hora: «Forma parte de la naturaleza de Compromís llegar a acuerdos en el último minuto, pero llegar, y siempre nos han salido muy bien las cosas».
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