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ARTURO CHECA
Lunes, 27 de junio 2016, 02:05
Valencia. Mónica Oltra, puño en alto, junto a Ada Colau y Pablo Iglesias, aclamada por las masas en el mitin de Unidos Podemos en un abarrotado paseo Lluís Companys de Barcelona. Mónica Oltra subiendo al escenario en los jardines de Méndez Núñez de A Coruña, entre los compases de la marcha imperial de Star Wars atronando y la 'lideresa' animando a los cabezas de cartel de En Marea a repetir los resultados de las elecciones autonómicas y municipales «y tirarlos otra vez a la calle». Mónica Oltra, en el cierre de campaña desde la capital de España, ante 10.000 personas en Madrid Río, como uno de los rostros más visibles de Unidos Podemos, el titular del anhelado 'sorpasso' y echando incluso balones fuera acerca de un cargo en un futurible gobierno central, «yo soy de mirar a los ojos de la gente», cuando le hablaban de un ministerio para ella. Mónica Oltra siendo más profeta fuera de su tierra que en ella durante la campaña electoral. Y al final, a la vista del resultado de 'A la valenciana', la amalgama de Podemos, Compromís y Esquerra Unida en la Comunitat, la coalición que desde la región pretendía poner nombre al cambio político en toda España, el resultado es que el estrellato de Mónica Oltra se ha estrellado contra su propio techo electoral.
Las cocinas electorales de Unidos Podemos hablaban de un objetivo de 800.000 votos en la Comunitat. Tampoco era un listón que supusiera tirar las campanas al vuelo. En los comicios del 20D, las dos formaciones unidas lograron 785.512. La cifra puesta sobre la mesa suponía enamorar a 14.000 valencianos más. Ninguna entelequia. Pero ni siquiera ese techo ha alcanzado la alianza tan visiblemente liderada por Mónica Oltra, lo que supone una derrota para la formación electoral y un varapalo para la estela de la lideresa. En 655.895 apoyos se ha quedado el listón de 'A la valenciana'. Lejos de los soñados 800.000. Pero es que el dato se sitúa incluso por debajo de los 673.549 votos que obtuvo en diciembre la unión de Podemos y Compromís. Con la suma de los 11.963 votos de Esquerra Unida, 785.512. Caer por debajo de esa cifra supone un fracaso para Compromís y que la deseada suma de los votos de EU se quede por el camino. En lectura personal acerca del aura política de Mónica Oltra, que no haya logrado enamorar a los seguidores de Esquerra.
La caída de votos y la decepción de resultados supone el primer varapalo duro en la carrera electoral de Oltra. Su primera derrota desde que allá por 2007 entrara como diputada en Les Corts como número tres de Compromís, desde que fuera mejorando sin cesar, cita a cita, sus resultados electorales. Desde que en 2011 lograra su mejor resultado electoral a golpe de eslogan en camisetas y haciendo de Compromís la tercera fuerza política de la Comunitat con siete diputados. Desde que el año pasado llegaran a levantar los cimientos del tripartito con su espectacular 18,7% de apoyos. Desde esa cima, Oltra, la lideresa en la sombra tras el presidente Ximo Puig, era ayer la viva imagen de la desolación, con una cara casi al borde del llanto entre bambalinas de la sede del partido, en la plaza del Pilar, como se ve en la foto que preside esta página.
El descalabro también existe obviamente a nivel de puntos porcentuales. Del 29,3% que obtuvo el 20D la suma de la candidatura de Podemos-Compromís y la de Unidad Popular: Izquierda Unida, Unidad Popular en Común, al 25,3 obtenido ahora.
El desplome de 'A la valenciana' es unánime en las tres provincias de la Comunitat, aunque especialmente radical en Valencia. Más de la mitad de los votos (74.000) que pierde la coalición se van en Valencia, otros 43.000 en Alicante y 12.000 menos en Castellón.
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