De los 1.300 millones ficticios del Consell a una petición de 2.464

El Consell nacido del resultado electoral de los comicios de mayo de 2015 no ha dudado en cuadrar las cuentas de los dos presupuestos que hasta ahora ha presentado y aprobado agregando 1.300 millones de euros ficticios. Los fiaba al cambio del sistema de financiación autonómica y que llegaran más fondos del Gobierno central a la Comunitat Valenciana.

Lo hizo con las cuentas de 2016 y repitió en las de este 2017. Al PP ya le salió el tiro por la culata cuando en 2015 incluyó una aportación de ese mismo calibre que colocó en los fondos de competitividad estatales. Pero el Gobierno no concretó la iniciativa del PP ni lo hizo con las cuentas del año pasado con el actual tripartito. El Ejecutivo central ya obligó al Consell a retirar esta iniciativa el pasado mes de agosto si es que tenía la pretensión de recibir algún euro del FLA.

Pero esta iniciativa que se sustanciaba en el presupuesto autonómico y que poco después se diluía a la menor indicación del Gobierno central, no deja de ser una declaración de intenciones del Ejecutivo autonómico para poner en evidencia la infrafinanciación.

Esa carencia de fondos del Gobierno central para con el autonómico ha estado acreditada por la comisión de expertos designada por todos los grupos parlamentarios en Les Corts. Fijó en 2.464 millones la cantidad necesaria para que la Comunitat Valenciana pudiera equipararse a la media estatal. En 2013 la media española alcanzó los 1.938 euros y cada valenciano se quedó a 221 euros menos, 1.717 euros.

Mientras tanto, la estrategia por la que apuesta el conseller de Hacienda, Vicent Soler, para la mejora del sistema autonómico de financiación y que la cantidad a recibir se acerque a esa media -hasta ahora siempre se ha encontrado por debajo- es que los expertos que forman esa comisión , se llegue a un consenso que allane el posterior debate político.

Soler confía en que la reforma del sistema financiero ya se incluya en los próximos presupuestos. Mientras, reclama unos fondos transitorios para este año con el fin de dar «un respiro» a las regiones que están peor financiadas que la media nacional.