El grupo del exconseller Guardiola salva la empresa Faus al comprarla por 7 millones

Un fondo de inversión liderado por el exconseller valenciano Felipe Guardiola ha salvado a la empresa Industrias Auxiliares Faus S.L. (Faus Group) del cierre al adquirirla por un total de 7,235 millones de euros. La mercantil de Real de Gandia estaba atravesando un lento proceso de agonía y llegó a entrar en proceso concursal ante la creciente deuda que mantenían los propietarios con los bancos.

El martes se produjo la subasta judicial de la empresa al no haber llegado a buen puerto el proceso de liquidación concursal. Las entidades bancarias rechazaron las ofertas presentadas que ascendían a 16 millones de euros. Hubo dos pujas por la unidad productiva, la de Guardiola y la de Sopena. Finalmente, la empresa se la adjudicó el primer grupo valenciano para la continuación de la actividad.

El procedimiento de ley concursal obliga a la sociedad a subrogar automáticamente los derechos de todos los trabajadores por lo que los alrededor de 200 empleados que temían irse a la calle seguirán en plantilla.

Un nuevo rumbo para Faus

De esta manera, se abre un nuevo rumbo para una empresa que ha llegado a ser un referente a nivel nacional en la fabricación y tratamiento de productos de madera. Faus nació en 1952 y en sus mejores épocas llegó a tener hasta 1.300 trabajadores. En todo este tiempo ha atravesado diferentes baches, pero este último ha sido quizá el más sangrante desde que la familia Faus vendió el negocio a Finsa en el año 2006. En 2008 llegó el azote de la crisis económica y la industria se fue abandonado poco a poco. El representante de Comunicación de CC.OO, Josep Albors, manifestó: «Faus funcionaba a la perfección, pero tras la compra de esta empresa por Finsa -una mercantil gallega- empezaron los expedientes de regulación de empleo y la deslocalización del trabajo». Asimismo, aseguró que muchos de los productos que se realizaban en Faus pasaron a producirse en otras plantas del Noroeste de España. La compra de las plantas de Faus en Gandia y Real de Gandia costó a Finsa 120 millones de euros, una cifra elevada, dijo Albors, pero que en su día tuvo el respaldo de los bancos, ya que la mercantil facturaba más de 300 millones al año.

El fondo de inversión Guardiola llega ahora con mucha fuerza para remontarla y reactivarla. La línea será continuista con la actividad industrial e incluso pretende ampliarla, según las primeras informaciones derivadas de la empresa. Ahora, los nuevos propietarios tienen un plazo de diez días para depositar un montante que supera los 7 millones de euros.

Los trabajadores expresaron ayer su enorme satisfacción al constatar que la mercantil seguirá funcionando. Desde la sección sindical de CC.OO de Faus, Albors se mostró muy esperanzado, ya que estima que incluso habrá un aumento del empleo en el futuro. «Es, sin duda, una buenísima noticia para la comarca de la Safor. La empresa no cierra, sigue la actividad industrial y no hay despidos», comentó.

Protestas y concentraciones

Las negociaciones de los últimos meses tenían en vilo a los empleados. A mediados de septiembre estos se concentraron en la plaza Major de Gandia para exigir medidas in extremis que evitaran el cierre inminente de la empresa. En la protesta participaron más de 70 trabajadores de esta histórica fábrica de productos de madera y acudieron también representantes de los Ayuntamientos de Gandia y de Real de Gandia.

En el acto, la plantilla de la factoría reclamó a los acreedores de la empresa, tres entidades bancarias, que permitieran la venta de la mercantil y que evitaran así la subasta de todos los bienes. Faus factura 35 millones de euros al año. Para el sindicato, la empresa funciona a la perfección y no da abasto a todos los pedidos que le realizan: «Exportamos a varios países europeos y asiáticos. Fabricamos parqué, tarima flotante y otros productos». El 90% de la producción actual de Faus se exporta al exterior.

Los trabajadores confían ahora en que la nueva firma vuelva a encender los motores que reactiven la industria en la comarca.