Un policía abate a un pitbull de un tiro en la cabeza para evitar un ataque

Un acalorado enfrentamiento con dos perros peligrosos en la playa de l'Auir de Gandia acabó en un enorme susto, pero pudo ocurrir una desgracia. Un agente de la Policía Local de la capital de la Safor abatió de un disparo a un pitbull que se disponía a atacarle cuando trataba de proteger a un ciudadano y a su mascota.

Los hechos ocurrieron sobre las doce del mediodía. Este vecino fue sorprendido por dos canes de gran tamaño, un macho y una hembra, que le atacaron y persiguieron mientras el hombre caminaba por el litoral con su mascota. Los perros estaban sueltos y su dueño no se encontraba en el lugar.

El ciudadano se subió a una de las duchas de la playa para ponerse a salvo. Desde allí, muy nervioso, pidió ayuda a la Policía Local. Minutos después acudió una patrulla que intentó tranquilizar a los animales. Sin embargo, no hubo manera. «Estaban enfurecidos e incluso se mordían y enzarzaban entre ellos», relató el coordinador del área de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Gandia, Javier Reig.

Ladraba con fuerza

Uno de los canes huyó, pero el otro se quedó ladrando «con todas sus fuerzas y dando visibles muestras de una gran agresividad», explicó Reig. El policía local se vio obligado a sacar una porra para defenderse. El can la agarró con la boca y no la soltaba. Debido a la fuerza del animal, el agente de la Policía Local de Gandia cayó al suelo, con lo que según indicó Reig, «no le quedó más remedio que disparar con la pistola al pitbull» para evitar que se le echara encima.

El tiro que recibió en la cabeza hirió de gravedad al perro, con lo que se barajó que fuera sacrificado. Al lugar de los hechos acudió una ambulancia del Servicio de Ayuda Médica Urgente (SAMU), que curó los rasguños que se hizo el ciudadano cuando se subió a la ducha de la playa. El agente no tuvo que ser asistido por los sanitarios. El otro perro que escapó fue localizado posteriormente.

Todo parece indicar que los perros se escaparon de una granja ubicada en el Camí de la Caseta del Guarda, en el término municipal de Gandia. Al parecer, salieron del recinto por un agujero que hay en la verja. Los dos canes llegaron corriendo hasta la playa de l'Auir, donde se toparon con el ciudadano y su mascota.

Fuentes de la Policía Local de Xeraco aseguraron que los animales peligrosos tenían un chip y que ya han identificado al propietario, que es un vecino de Xeraco originario de Tavernes de la Valldigna. Tanto desde el Ayuntamiento de Gandia como del de Xeraco aseguraron que tomarán medidas de acuerdo con la ordenanza de tenencia de animales peligrosos. Asimismo, darán parte de los hechos a la Generalitat Valenciana.