El fundador de un club de coches clásicos muere en accidente en Francia

Amaban y admiraban los vehículos clásicos. Y la desgracia se cruzó en su camino justo cuando viajaban en uno de ellos, un Citroën GS de los 70 con el que acudían a un encuentro de aficionados a automóviles de esta marca en París. Un accidente en Francia segó el viernes la vida del socio fundador del club valenciano HortaClássics, el castellonense Juan Díaz. Un amigo zaragozano, Miguel Ángel García, murió en el siniestro y otros dos valencianos vinculados al grupo sufrieron heridas muy graves.

La tragedia sobrevino en la madrugada del viernes. El grupo había partido de Valencia y su destino era París, un trayecto de 1.200 kilómetros. Los cuatro viajaban en el viejo Citroën que «mantenían en muy buen estado pese a su antigüedad», como confirmó un portavoz de HortaClássics, una de las más importantes asociaciones de amigos del coche clásico en la Comunitat.

Todo se truncó a las 5.45 horas, cuando sólo restaban 150 kilómetros para llegar a la capital y circulaban por la A-10, cerca de Orleans. Según medios de comunicación locales, el reventón de un neumático desató la tragedia. El vehículo impactó contra la mediada, volcó y acabó envuelto en llamas con sus cuatro ocupantes atrapados.

Juan Díaz, de 42 años, perdió la vida en el acto, al igual que su compañero Miguel Ángel Gracia, zaragozano, casado y padre de tres hijos. Michel, como le conocían sus colegas, era miembro del club Citroën GS. En pocos minutos, policías y bomberos de la zona acudieron al lugar del siniestro. La carretera fue cortada al tráfico y un helicóptero aterrizó en la zona para trasladar a los dos valencianos heridos.

Uno de ellos es Fernando Rodríguez, tapicero con negocio en Valencia, socio de HortaClássics y propietario del automóvil accidentado. Fue evacuado a un hospital de Tours con quemaduras en el 35% de su cuerpo. «Es muy conocido en el mundo de los Citroën GS y un activo participante en todos los eventos organizados por clubes dedicados a la marca francesa», destacaron desde HortaClássics.

El segundo herido es José Muñoz Blanco. Fue trasladado a un hospital parisino donde ayer permanecía ingresado en estado grave. Es también miembro del club Citroën GS y sus familiares se han trasladado ya a la capital gala tras conocer lo sucedido. Su estado es grave.

Conocimiento y generosidad

El mundo valenciano del motor lloraba ayer, al unísono, la muerte de Juan Díaz. Mecánico con taller en Vila-real, era el socio fundador de HortaClássics. Así retratan a «nuestro Juanito» quienes lo conocían: «Era especial por su generosidad a la hora de ayudar y aconsejar al que lo necesitara, un referente por sus extensos conocimientos sobre vehículos históricos». Le fascinaban los italianos y los franceses. Era soltero y compartía la pasión por los coches con su hermano Fran, también socio de la entidad.

Desde HortaClàssics no creen que la antigüedad del Citroën con el que circulaban haya influido en la tragedia. «Es muy improbable. Como buenos amigos de los clásicos y de los Citroën, realizaban cientos de kilómetros para participar en concentraciones, tanto en España como en Francia. Acudían con los coches perfectamente mantenidos y puestos a punto por ellos mismos. Eran auténticos especialistas».

El perfil social de la asociación en internet se inundaba ayer de muestras de pésame, sentidos recuerdos de las víctimas y apoyo a las familias. El mundo valenciano del automovilismo estaba de luto, al igual que HortaClàssics, una agrupación con sede en Torrent y que hoy aglutina a más de 150 socios repartidos por Valencia y Castellón.

La asociación destaca por su especial dinamismo, como prueba su participación en algunas de las ferias más importantes, como la Retro Auto&Moto Valencia o el festival Classics and Legends que organiza el Circuito Ricardo Tormo. El impulso de Díaz fue decisivo y su legado como amigo y aficionado, imborrable.