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A. TALAVERA
Sábado, 18 de junio 2016, 00:13
sumacàrcer. El término de Sumacàrcer, en la Ribera, ha sido uno de los más afectados por el incendio que se inició la tarde del miércoles en Bolbaite. La dirección del viento hizo que el jueves, tras casi 24 horas de este incendio en activo, el foco se acercara cada vez más al municipio y que fuera necesario desalojar la urbanización la Florida por precaución.
Sin embargo, sobre las diez de la mañana de ayer regresaban a sus casas los vecinos de esta urbanización de Sumacàcer desalojados la noche anterior. La impotencia y el miedo tuvieron despiertos a los vecinos de esta municipio de la Ribera provocando momentos de tensión. Según el alcalde, Txema Peláez, «las llamas han pasado a sólo un kilómetro y medio del casco urbano». En sólo unas horas, avanzó unos 500 metros sin que se pudiese detener.
«La zona era muy abrupta y hubo momentos en los que no sabíamos si serían capaces de controlarlo por la velocidad en la que avanzaba», relata Peláez.
Pese a que ayer se estabilizó este incendio, la tensión entre los vecinos por un rebrote era evidente. Más si cabe al llegar humo y cenizas procedentes del fuego que todavía sigue vivo en Carcaixent que volvieron a alertar a los vecinos.
Los 85 vecinos desalojados de la Florida, muchos de ellos ancianos y niños, no olvidarán el mal trago ya que tuvieron que salir con lo puesto y sin saber si al regresar sus viviendas seguirían en pie. La jornada de ayer se comenzó a controlar la situación y antes de lo previsto los servicios de emergencias permitieron el acceso a las viviendas, ya que el peligro había pasado.
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