Muere uno de los jóvenes heridos en la carrera ilegal de motos de Rafelguaraf

La tragedia se rozó el domingo por la tarde y ahora se ha consumado. Uno de los siete heridos en la carrera ilegal de motos que el domingo se fraguó en Rafelguaraf perdió ayer la vida en el Hospital la Fe de Valencia. Se trata de Óscar T. C., de 18 años y conocido entre sus colegas con el apelativo cariñoso de 'Pegaso'. La víctima, originaria de Tavernes de la Valldigna, no pudo superar las gravísimas lesiones al ser arrollado junto a otros testigos del 'pique' y pereció a primera hora de la tarde. Ayer, eran muchos los familiares y amigos que lloraban su pérdida y maldecían la fatalidad.

Según se desprende de las primeras investigaciones, los participantes en la carrera habían acudido a la III Matinal Motera de Rafelguaraf. Ya finalizado el certamen de aficionados, se dirigieron por su cuenta a una amplia recta del pueblo en la zona conocida como Partida del Pla y que discurre entre campos.

Los testigos coinciden en que al menos dos de los implicados iban con motos de gran cilindrada y Óscar era uno de los jóvenes espectadores del 'pique' entre colegas. Según fuentes próximas al caso, la víctima estaba demasiado cerca del punto por el que corría una de las motos, una KTM 525 conducida por un joven de 19 años. Se ignora si se asomó por la curiosidad propia de su afición o bien porque deseaba pasar al otro lado de la estrecha vía rural.

Lo cierto es que el motorista arrolló a Óscar y luego cayó al suelo. Él y su vehículo recorrieron varios metros deslizándose por el asfalto hasta empotrarse contra otro grupo de cuatro jóvenes espectadores. Todos ellos acabaron también heridos.

Otra moto del mismo modelo y cilindrada avanzaba por detrás de la accidentada en primer lugar. En este caso, un joven de 19 años, estaba a los manillares. El sobresalto al presenciar el arrollamiento múltiple o una maniobra evasiva hicieron que también acabara en el suelo y, al parecer, arrollando a Óscar por segunda vez en un intervalo de pocos segundos.

Las lesiones del joven de Tavernes eran de extrema gravedad, en especial una herida craneal muy severa. Su delicado estado hizo que fuera evacuado al Hospital La Fe de Valencia, mientras que los otros seis heridos fueron asistidos en el Hospital de La Ribera y en eLluis Alcanyís de Xàtiva.

La noticia de su muerte sumió ayer por la tarde en la tristeza a la localidad de la Safor. Las muestras de dolor se sucedían en las calles y también en las redes sociales. En cuestión de horas, se convocó una concentración motera «en honor a Óscar 'Pegaso' programada para el domingo a mediodía en un supermercado del municipio.

«Sigue dando gas en el cielo»

Colegas de Óscar, como Miguel, publicaban lamentos y recuerdos en sus perfiles de Facebook: «Creí que teníamos mucho tiempo juntos para alcanzar nuestros sueños y ahora no estás. Hoy se ha marchado una gran persona. Siempre estarás con nosotros». Su deseo era este: «Quiero que sepas que donde estés siempre te llevaremos en el corazón. Por esas rutas y momentos inolvidables que pasamos junto. Siempre te recordaré amigo mío. Sigue dando gas desde el cielo».

LAS PROVINCIAS trató de contactar con los familiares de la víctima para conocer su versión sobre lo sucedido en Rafelguaraf, pero los allegados de Óscar declinaron hacer declaraciones y pidieron «respeto por los duros momentos por los que pasa la familia y amigos.

Con la desgracia de Rafelguaraf, las carreras ilegales o demostraciones moteras se cobran la segunda víctima mortal en la Comunitat desde 2007. Los peligrosos 'caballitos' en las noches previas a los grandes premios de motociclismo de Cheste acabaron en tragedia el 3 de noviembre de ese año. Una menor perdió la vida al caer cuando la moto en la que viajaba como acompañante choco contra otra.

La Audiencia de Valencia condenó a prisión a los motoristas por conducción temeraria, homicidio imprudente y lesiones por imprudencia, pues una espectadora resultó herida. Uno de los jóvenes moteros, que carecía de carné para motos, circulaba a gran velocidad. El juez que dicto la sentencia fue contundente al asegurar que los dos conductores hicieron gala de una «temeridad manifiesta».