

Secciones
Servicios
Destacamos
Ó. DE LA DUEÑA
Martes, 6 de abril 2010, 13:48
Los agricultores de la Safor están tomando medidas para evitar robos en los campos de naranjas. En Tavernes los propietarios de huertos se han visto obligados a cerrar los caminos rurales para impedir el paso a los ladrones de cítricos y en Oliva reclaman que se controle el origen de la fruta que se vende tanto en mercadillos como en establecimientos especializados, como medida preventiva para evitar hurtos.
El objetivo es que cuando las naranjas lleguen a un punto de venta, el comerciante sepa de dónde procede, tal y como explicó el representante de la Asociación Valenciana de Agricultura (AVA) de Oliva, Vicent Faro: «Estamos sufriendo muchos robos. Hay que controlar más la fruta, desde que sale del campo hasta que llega a la tienda».
Faro comentó que en Oliva están luchando por que se implante la 'Guía Conduce'. Esta iniciativa ya está en marcha en otras localidades valencianas como es el caso de Alzira. «Se hace un seguimiento de la fruta durante todo su transporte, desde que se recolecta hasta que llega a los establecimientos».
El representante de AVA añadió que si esta medida sale adelante en Oliva permitirá que cuando la fruta llegue a su destino se conozca de forma precisa su origen: «De qué campos procede y de qué parcela». Se trataría de establecer una guía para transportar las naranjas, «una hoja de ruta», añadió.
Y es que, agregó, toda la fruta tiene que tener un origen definido, «hasta para la que se vende en el mercadillo». Afirmó que generalmente cuando las naranjas robadas no llegan a los establecimientos, ya que los comerciantes quieren saber la procedencia del producto que compran, pero sólo con la voluntad de los tenderos no basta para atajar los robos.
Para que esta medida salga adelante, explicó Faro, tienen que ponerse de acuerdo el Ayuntamiento, en este caso Oliva, y el Consell Agrari Local. Una vez se haya determinado la aplicación de la iniciativa tiene que llevarse al pleno local y aprobarse la ordenanza pertinente.
En los últimos meses los agricultores de Oliva han sufrido innumerables saqueos: «No se pueden contar, pero han sido muchos. En febrero iban a por las clementinas, y ahora atacan a las últimas variedades, la navel power y la valencia late».
Faro añadió que los propietarios rehusan denunciar: «Si no sabes quién ha sido no vale la pena perder el tiempo en el cuartelillo y si has visto al ladrón mejor no denunciar ya que sabe quién eres y cuál es tu huerto», relató.
Por su parte, los agricultores de Tavernes han decidido no quedarse pasivos ante la gran cantidad de robos que se están produciendo en los campos de naranjas de la Vall. Con el fin de evitar más saqueos, el Sindicato de Riego ha decidido cerrar los caminos que son de su propiedad en la zona de la Partida y se plantean la posibilidad de organizar patrullas nocturnas para controlar los cultivos.
Ya se han cerrado los caminos rurales que pertenecen a la agrupación. Para poder circular por la Partida sólo se han dejado libres el Camí del Rastell y el de la cooperativa San Isidro, el resto de vías han quedado cerradas.
El edil de Agricultura, Mario Enguix, afirmó que la medida se ha tomado en caminos privados y pertenecen a la comunidad de regantes: «Somos sabedores de esta decisión y la apoyamos desde el Consistorio. Debemos frenar la oleada de robos y estas medidas nos ayudarán a poder controlar mejor el término».
La decisión ha sido comunicados a la Policía Local. El goteo constante de robos no ha cesado en una campaña que comenzó tranquila, pero ha visto como se han multiplicado de manera exponencial el número de hurtos. Desde el consistorio se han comprometido a incrementar los efectivos policiales en el campo.
No obstante, el término de Tavernes es de grandes dimensiones y resulta muy complicado realizar un control total.
Los caminos cortados disponen de vallas de señalización que han sido aportadas por el Ayuntamiento. Se han dado casos de todo tipo respecto a la magnitud de las naranjas robadas. Desde unos simples cajones a miles de kilos. El robo más importante se realizó precisamente en la Partida. Los ladrones actuaron en grupo y lograron sustraer más de diez mil kilos. Dejaron las primera filas de naranjos sin cortar, y desde dentro del huerto, sin levantar sospecha, recolectaron ilegalmente la naranja y la sustrajeron usando un vehículo de grandes dimensiones sin que nadie se percatara hasta días después.
El corte de estas vías suscitó malestar entre los agricultores de la foblación vecina, Favara, ya que algunos de estos caminos eran clave para que pudieran acceder a sus terrenos.
Ante esto, desde Tavernes se decidió abrir algunos de los caminos cerrados.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.