Las cruces desafían al agua

La falla Almirante Cadarso-Conde Altea se alzó ayer con el premio extraordinario «Paco Domingo» en la sección A del concurso de las cruces de mayo. La lluvia caída desde el domingo no fue impedimento para que se mantuvieran los inscritos en el certamen de Lo Rat Penat.

El primer premio recayó en la Junta de Fiestas del Grupo de Viviendas de Nuestra Señora de los Desamparados. El segundo, para la comisión Plaza de la Cruz-Los Ángeles y el tercero para la falla Palleter-Erudito Orellana, en una clasificación que cerró la comisión Convento Jerusalén.

La antigua fiesta de la Invención de la Cruz, en la que este año han participado 81 asociaciones culturales y festivas, ha tenido un componente sorpresa como ha sido la copiosa lluvia caída la noche víspera de su montaje que deslució, en algunos casos, los diseños florales.

La madrugada del lunes una inesperada tromba de agua caía en la cuidad y paralizaba los trabajos de ornamentación de las cruces. En el caso de las comisiones falleros todos sus integrantes esperaban en los casales que disminuyera la lluvia con entretenimientos como jugar partidas de truc y parchís, sin olvidar las cenas de confraternidad.

En la sección B el premio extraordinario «Pere Delmonte» fue para la comisión Plaza del Doctor Collado, el primero para la comisión Pintor Goya-Brasil y el segundo para la falla Zapadores-Vicente Lleó. El listado lo completaban la falla plaza Lope de Vega y la comisión Joaquín Navarro-Carrícola.

Los historiadores señalan al emperador Constantino el Grande como el que potencia la Cruz al tener una visión de la misma antes de una batalla contra los bárbaros. Una Cruz de Cristo con el lema «In hoc signo Vincis». A principios de siglo, según el desaparecido poeta Pere Delmonte en lu libro dedicado a las Cruces de Mayo, los gremios decoraban con flores las cruces de término. A pesar de ello 1949 es el que se señala como primero que Lo Rat Penat, junto con el Ayuntamiento, organizan el primer concurso.

Por otro lado cabe recordar que la Basílica de la Virgen acogerá por séptimo año consecutivo el besamanos a la Mare de Déu el próximo día 19, desde las siete de la mañana hasta hasta que no queden ningún devoto sin pasar.

La imagen estará situada en el presbiterio, en el centro del altar mayor, a la misma altura que las personas para facilitar besar su mano. La previsión es que pasen miles de personas, en una tradición de pocos años pero que se ha consolidado como una de las más queridas por los fieles por las largas colas que se forman.