Muere un niño de 13 años al caerle un muro mientras jugaba en Almoines

Una tarde de juegos se convirtió en tragedia para un grupo de chavales que escogió el lugar equivocado para divertirse: una vieja alquería del siglo XV que está en ruinas. Un chico de 13 años murió ayer sepultado al derrumbarse uno de los muros de l'Alqueria del Trinquet, en el término municipal de Almoines.

El joven, natural de Bellreguard, se encontraba jugando en el viejo inmueble con otros dos amigos, cuando se le vino encima uno de los muros laterales del edificio, de unos 10 metros de altura.

Los dos chicos que se salvaron del impacto de los escombros fueron rápidamente a alertar del mortal accidente, que se produjo alrededor de las 20.30 horas. Los dos compañeros corrieron a darle la noticia a un adulto, que dio el primer aviso al teléfono del Centro de Coordinación de Emergencias.

A partir de este momento comenzó el despliegue de los cuerpos de seguridad. Hasta el lugar del suceso se desplazaron efectivos de Guardia Civil, Policía Local y Bomberos, que hallaron el cuerpo del chico bajo una montaña de escombros. Al cierre de esta edición, los bomberos, bajo la supervisión de la Policía Judicial, continuaban desescombrando la zona para recuperar el cuerpo del adolescente. En un primer momento no descartaron que pudiera haber más víctimas, aunque con el paso de las horas esta hipótesis fue perdiendo fuerza.

El momento más doloroso aún estaba por llegar. A los pocos minutos de ocurrir la desgracia llegó la madre del joven, que al confirmar que era su hijo quien yacía bajo las piedras tuvo que ser trasladada de inmediato al hospital tras sufrir un ataque de ansiedad.

Ya perdió otro hijo

La madre es trabajadora del Ayuntamiento de Bellreguard, por lo que la consternación en la Corporación se hacía ayer más que evidente. Un dolor acrecentado por el hecho de que hace apenas dos años esta familia ya tuvo que soportar la muerte de otro de sus hijos.

La fuerza del viento no era significativa en la tarde noche de ayer. Por este motivo, fuentes municipales presumen que el mal estado del inmueble ha sido la principal causa del desplome. No obstante, las lluvias constantes de todo el invierno han podido acelerar el deterioro de la alquería y ocasionar la caída del muro.

La Alqueria del Trinquet es una torre medieval cuyos primeros vestigios arquitectónicos se remontan al siglo XV, si bien existen yacimientos arqueológicos en la zona datados en el siglo XI. Está situada a las afueras de la población, a medio camino entre Almoines y Bellreguard, enclavada en medio de huertos de naranjos.

El edificio, muy deteriorado por el paso del tiempo, cambió de manos hace ahora cuatro años, cuando los antiguos propietarios, de Almoines, la vendieron.

Los nuevos dueños vallaron toda la parcela para impedir el acceso a la alquería, y la altura de los muros hace complicado saltarlos, por lo que todo hace suponer que los chicos se colaron en el interior del recinto.

La Alquería del Trinquet es un conjunto monumental de gran interés arqueológico, arquitectónico y etnológico. La torre medieval cuenta con una alquería barroca anexa, un trinquete para jugar a pelota valenciana y un pequeño recinto amurallado que encierra un antiguo huerto de naranjas.