«Las Fallas son la auténtica pasión de mi vida»

Laura Caballero es consciente de que haber llegado a la corte es un privilegio. Sabe que queda otro escalón, pero si no es nombrada fallera mayor la desilusión se quedará en casa.

-¿Más serena ahora?

-Mucho más y, sobre todo, asimilando todo lo que ha pasado y muy contenta.

-¿Esperaba ser elegida de la corte de honor?

-Pues mira, la verdad es que cuando te ves entre las 69 piensas que tienes la posibilidad de salir. Sin embargo, a medida que van pasando los días vas dudando. Depende del ánimo. La verdad es que no lo tenía seguro.

-Y cuando escuchó su nombre, ¿cómo reaccionó?

-Fui la primera en salir y no lo esperaba. Me quedé paralizada y mi compañera de sector fue la que me dijo que era yo. En ese momento me temblaron las piernas, tenía ganas de gritar, de llorar, de todo.

-¿Muy fallera?

-Muchísimo. En mi casa se vive la fiesta de forma extraordinaria. Te explico: mi madre fundó mi falla, mi padre es el presidente desde hace seis años y mi hermana es la jefa de prensa. Yo me encargo de las presentaciones y del teatro de los niños. Las Fallas es lo que más me apasiona en la vida.

-¿Su familia le ha dado algún consejo?

-Qué esté tranquila y que disfrute, que no quiera que todo pase deprisa, que lo viva. Es un año y hay que saborearlo.

-¿Qué es lo que más le atrae del mundo fallero?

-Que en las calles de Valencia, desde el primero de marzo, se respira germanor. Ese ambiente es contagioso y no lo tiene ninguna fiesta en España.

-¿Qué le atrae del monumento fallero?

-Todo tiene magia, pero me atrae mucho la pintura.