Siete bomberos y dos policías se movilizan para liberar el brazo de un niño en Valencia

El escondite que un niño de siete años eligió para guardar unas golosinas se convirtió en una trampa para su pequeño brazo. Durante 15 minutos, la extremidad quedó atrapada en la pata hueca de una mesa de madera. El suceso movilizó ayer por la tarde a siete bomberos y dos policías locales. Los hechos ocurrieron en un piso de la avenida Blasco Ibáñez de Valencia. La madre llamó de inmediato al teléfono de emergencias 112. A los pocos minutos, una patrulla de la Policía Local y dos vehículos de los bomberos llegaron al lugar. También acudió una ambulancia municipal por si el menor necesitaba atención médica. Al final sólo actuaron dos bomberos, que desatornillaron la tabla de la mesa y liberaron el brazo en pocos minutos. La madre agredeció la rápida y eficaz labor de los servicios de emergencia. «Cuando hemos llegado, el niño estaba muy tranquilo. Ha sido todo muy rápido y el servicio no ha tenido ninguna complicación», afirmó José Varea, el sargento jefe del equipo de bomberos. La madre estaba cocinando cuando su hijo metió el brazo en el hueco de la mesa. El despliegue de los bomberos y la policía asustó a los vecinos. Algunos salieron de sus casas para preguntar qué estaba pasando. El número de la avenida Blasco Ibáñez donde ocurrió el suceso lo omitimos para preservar los derechos del menor.