El Gobierno y el Consell cruzan acusaciones por el declive del San Pío V

La buena sintonía que Paz Olmos aseguró hace unos días que encontró cuando expuso los problemas que sufre el San Pío V al delegado del Gobierno en la Comunitat, Ricardo Peralta, no ha durado ni una semana. Ayer, la consellera Trini Miró aseguró que el deterioro del Museo de Bellas Artes es la «mayor vergüenza que he visto en mi vida». Por su parte, Peralta acusó a Olmos, directora de Patrimonio, y al secretario autonómico, Rafael Miró de «utilizar la cultura con carácter partidista» y en mentir para desgastar al Gobierno.

Miró, durante una comparecencia en les Corts, llamó la atención sobre la situación del museo y afirmó que su mantenimiento y seguridad están «garantizados» a pesar de que Zapatero «se haya quitado la careta» en cuanto a la quinta fase de ampliación», que actualmente está en el aire por falta de dotación presupuestaria. Peralta, sin embargo, aseguró que «las dos personas que el jueves representaban a la Generalitat (Miró y Olmos, que visitaron el San Pío V) les constaba que en estos momentos y en virtud de una enmienda del grupo socialista la dotación presupuestaria para este museo es de 1,4 millones. Ese dato fue ocultado conscientemente por los representantes de la Generalitat, que no dudan en utilizar la cultura con carácter partidista y en recurrir a la mentira para desgastar al Gobierno de España».

No obstante, la enmienda, a pesar de que tiene todos los visos de ser admitida, aún no ha sido ni votada en el Congreso de los Diputados. En cualquier caso, Olmos sí se refirió a ella. Tanto el pasado jueves como hace una semana antes, cuando LAS PROVINCIAS desveló que desde el Ministerio se admite que, a pesar de dar su visto bueno a la enmienda, por cuestiones «técnicas y de contabilidad», según Olmos, en 2011 el museo no recibiría más que 350.000 euros, cantidad insuficiente para arrancar la quinta fase de las obras de ampliación.