Borrar
A la derecha, García Sentandreu increpa a Joan Laporta, que se sonríe, junto a Josep Guia . :: MIKEL PONCE
La provocación catalanista de Laporta termina en trifulca
Politica

La provocación catalanista de Laporta termina en trifulca

Solidaritat y PSAN hacen una proclama independentista en la calle y el ex presidente del Barça sufre un intento de agresión

HÉCTOR ESTEBAN

Lunes, 24 de enero 2011, 01:41

Sucedió más o menos lo esperado: trifulca de bienvenida a Joan Laporta en su visita a Valencia para vender su provocadora fórmula independentista en favor de los 'països catalans'. Los ingredientes estaban todos encima de la mesa. En la calle Barcelonina, a medio camino entre la plaza del Ayuntamiento y la de Rodrigo Botet, medio centenar de manifestantes, con banderas del GAV y España 2000, se desgañitaban lanzado proclamas anticatalanistas. Un grupo que estaba bajo el control policial.

En la plaza Rodrigo Botet se congregaron los partidarios de Joan Laporta, el líder de Solidaritat Catalana per la Independència, que se hizo esperar más de lo previsto. Conserva sus tintes presidencialistas. Llegó pasado el mediodía y su tardanza caldeó todavía más el ambiente. Allí, junto a una pancarta de bienvenida y dos banderas independentistas, el líder del PSAN y colaborador del nuevo partido, Josep Guia, hizo la presentación a pleno pulmón con foto de familia. La performance, a ritmo de dolçaina y tabalet, terminó al grito de «independència» y «vixca la terra lliure». Se entendió como una provocación.

El líder de España 2000, José Luis Roberto, que estaba en la puerta del hotel donde se iba a celebrar el acto, asistió como testigo silencioso a ese particular homenaje con su sudadera de «español sin complejos». Al parecer, la policía no lo desalojó al estar hospedado en el establecimiento. En el interior del hotel tuvo un cambio de impresiones con Núria Cadenes, del PSAN.

La movida llegó luego. En el recibidor del edificio. De la zona del ascensor apareció un grupo de cuatro o cinco personas liderado por el fundador de Coalició. Juan García Sentandreu. Algunos llevaban el rostro medio tapado e intentaron acercarse a Laporta con métodos poco amistosos. Mostraron senyeras y profirieron insultos contra el líder catalanista.

Se vivieron momentos de gran tensión entre partidarios de uno y otro bando, lo que obligó a intervenir a la Policía Nacional que entró en el hotel para separarlos y que la cosa no llegara a mayores. Aprovechando la confusión, alguien utilizó un esprai de defensa o algún tipo de sustancia picante, que esparció en el hall provocando picor de ojos y de boca a varios de los presentes y testigos en la trifulca. En el lado de los independentistas también había alguno con ganas de guerra, como un chaval que en la calle ya se enfrentó con los manifestantes. Laporta se escabulló rápido, protegido por parte de los suyos mientras la tropa hacía frente a sus enemigos políticos. El ex presidente del Barça sólo se preocupó después de su flequillo.

Lo curioso es que nadie tuviera controlado a Sentandreu. Era obvio que no estaba entre el grupo de la calle Barcelonina. Si no estaba allí, estaría en otro sitio. Y eso que avisó de que acudiría a recibir a Laporta. El fundador de Coalició apareció en el momento más inesperado y pilló a todos por sorpresa, especialmente a las fuerzas del orden público, que se encontraron con todo el pastel en el recibidor del hotel.

Mesa petitoria

El acto en sí fue una proclama en favor de la independencia de los països catalans. Asistieron unas 250 personas. Laporta dejó claro que quiere que su partido pueda tener representación en Les Corts Valencianes. Dijo que su formación, que ha encontrado la colaboración del PSAN en la Comunitat, hará sus trabajo «de manera tranquila, pacífica y responsable». Algo que no casó con lo visto minutos antes.

Al margen de esta declaración de intenciones también existía el afán recaudatorio para el partido. Por eso, en la antesala de donde se celebró el acto había una mesa en la que simpatizantes y amigos podían dejar su donativo para Solidaritat Catalana. El dinero se podía soltar en efectivo o en tarjeta, que para eso había allí una maquinita.

Los del PSAN tuvieron especial interés en poner de manifiesto que algunos de sus miembros han sido procesados y encarcelados. Ayer, lo volvieron a hacer público al presentar a Guia y Cadenes. Todos los oradores afirmaron que este es el paso definitivo al independentismo catalán frente a la opresión española y antes de irse a comer, levantaron el puño con la Muixeranga.

El día terminó para Laporta con el homenaje de varias peñas del Barcelona en la Comunitat.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

lasprovincias La provocación catalanista de Laporta termina en trifulca