Helga Schmidt se plantea dejar el Palau de Les Arts por los recortes

El adiós de Francisco Camps a la presidencia de la Generalitat puede ser la puerta de salida de Helga Schmidt como intendente del Palau de Les Arts. Fuentes consultadas por este periódico aseguraron que si Schmidt quiere dejar su puesto, como así parece que ha trasladado a su círculo más íntimo, desde la Generalitat se le van a dar todas las facilidades para que deje el Palau. Su adiós permitiría al Gobierno valenciano ahorrarse uno de los sueldos más estratosféricos del organigrama ya que su nómina ronda los 180.000 euros al año.

Según fuentes consultadas por este periódico Schmidt no estaría dispuesta a continuar su gestión por el descontento ante los continuos recortes presupuestarios que ha sufrido el coliseo debido a la crisis económica. En los últimos años se ha visto obligada a descender el número de producciones y a cancelar algunas de las óperas previstas.

La llegada de Concha Gómez al cargo de administradora del Palau de Les Arts tampoco ha sentado bien a Schmidt. Ambas habían trabajado juntas durante la etapa en que Gómez fue secretaria autonómica de Cultura. Su relación nunca fue buena. Ahora la intendente, según las fuentes consultadas, intentó modificar las normas de la fundación para hacerse con atribuciones que le corresponderían a la nueva administradora.

La hoja de ruta es que si Schmidt sale del Palau de Les Arts sea la propia Concha Gómez la persona elegida para sustituirla en la gestión. Se buscaría un director artístico pero mucho más económico que la actual. El adiós de la intendente austriaca, cuya gestión siempre ha estado envuelta en la polémica, aligeraría de forma significativa el gasto de personal de la Fundación del Palau de Les Arts. Además, hace unos años el responsable del área económica de la institución dimitió por un enfrentamiento que no ha sido aclarado.

La intendente austriaca llegó a Valencia en el año 2000 por ser una persona próxima a Plácido Domingo y desde entonces siempre ha contado con el apoyo incondicional del ya expresidente de la Generalitat Francisco Camps. Incluso cuando el PSPV denunció los gastos de Schmidt. A su sueldo de 180.000 euros había que sumarle las dietas, que elevaron la nómina de la intendente austriaca a más de 280.000 euros en algún ejercicio. Su sueldo base era el doble que el de su homólogo del Teatro Real de Madrid, aunque Schmidt siempre lo justificó en el hecho de que hacía una doble labor: gestión y dirección artística.

En 2003, según la documentación oficial del Palau de Les Arts, la intendente austriaca cobró 283.240 euros. Un año después, los ingresos fueron 275.707 euros. Entre los gastos directos destacaron los 7.028 euros en 2003 en restaurantes o los casi 11.000 en los dos años en desplazamientos y taxis. En los gastos indirectos de 2003 y 2004, figuraron casi 19.000 euros en alquiler de coches; más de 6.000 euros en restaurantes y casi 800 en flores. La socialista Noguera en su día mostró facturas, como los 3.000 euros de alojamiento en un hotel de Viena del 27 al 29 de abril de 2005. En Valencia también tenía un carrito de golf que costaba 350 euros al mes para desplazarse por el recinto del Palau de les Arts. La Fundación le pagaba hoteles de cuatro estrellas y turista en avión si viaja por Europa. A América, en bussines.

Schmidt, que realizó en 2009 una prórroga de su contrato hasta 2014, ha manifestado en varias ocasiones su confianza plena en el expresidente. En ocasiones, se ha criticado a la responsable del Palau de les Arts gestos altivos por querer tratar temas relacionados con el auditorio en lugar de con los consellers del área. A muchos de ellos los ninguneaba, como es el caso de Trini Miró, extitular de Cultura.

Esta no sería la primera vez que se hablase de su posible salida. El año pasado el Maggio Fiorentino le hizo la propuesta de convertirse en superintendente del teatro italiano, algo que ella decidió rechazar por el momento.