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BURGUERA dburguera@lasprovincias.es
Martes, 11 de octubre 2011, 18:55
La Generalitat negocia un acuerdo con La Caixa para fin de compartir la gestión de la programación del Centro del Carmen de Valencia.
La inversión realizada en el centro cultural para rehabilitar una superficie de 1.590 metros cuadrados ascendió a 3,7 millones de euros. Desde 2008, el Gobierno central puso 1,1 y la Generalitat 2,6 millones. El renovado museo abrió sus puertas el pasado mes de abril con 'Retratos de la Belle Epoque', una exposición de alto nivel, tanto en calidad como en cantidad, para la cual se contó con la ayuda imprescindible de La Caixa para llevarla a cabo. La muestra costó un millón de euros. Tras su presencia para la puesta de largo del museo valenciano, la exposición viajó al CaixaForum Barcelona, donde se pudo ver hasta hace un par de semanas. Se trató de la primera vez que la Generalitat y la entidad financiera catalana sumaron fuerzas para coproducir una exposición. El principio de lo que puede ser una gran amistad. Intereses compartidos no faltan.
La Generalitat necesita aligerar su carga de gastos. Tras el esfuerzo realizado para poner en marcha el Centro del Carmen, el horizonte insinúa malos tiempos para los presupuestos culturales. La Administración autonómica corre el riesgo de encontrarse con que la inversión realizada en el cotenedor no es sostenible en contenidos. A no ser que aparezca una especie de mecenas.
Cuando los representantes de La Caixa estudiaron la ubicación (geográfica) y situación (económica) del nuevo centro cultural multidisplinar valenciano entendieron que se trataba de un auténtico bombón para los proyectos de su obra social. Los directivos de la entidad ya comentaron en la inauguración de 'Retratos...' la idoneidad del antiguo convento para convertirlo en un gran escaparate de las activida des de La Caixa.
A partir de entonces, y ya antes, la negociación sobre el asunto se ha mantenido al margen de los cambios en la dirección de la Conselleria de Cultura, que ha pasado a ser también de Turismo y asumir la portavocía del Consell.
El actual secretario autonómico de Cultura, Rafael Ripoll, ha viajado en repetidas ocasiones a Barcelona en los últimos meses con el fin de reunirse con miembros de la entidad catalana para estudiar el modo en que La Caixa y la Generalitat pueden encauzar una programación conjunta en el Centro del Carmen, según fuentes de la Generalitat consultadas por LAS PROVINCIAS. La intención del Consell es conseguir un acuerdo por el que el espacio multidisciplinar valenciano ofrezca más de la mitad de sus contenidos programáticos a través de los gestores culturales de la obra social de la entidad.
Beneficio mutuo
«El ciudadano quiere una oferta de calidad, al margen de quién sea su financiador. Cuando logremos llegar a un acuerdo, La Caixa se beneficiará del escaparate que supone instalar sus actividades en un espacio como el Museo del Carmen, y la Conselleria se ahorraría costes en lo que se refiere a la inversión en contenidos», señalaron las mismas fuentes.
La entidad financiera dispone de dos espacios culturales de referencia tanto en Barcelona como en Madrid, pero no se plantea en la negociación, como condición indispensable, copiar esa misma fórmula de gestión en Valencia. En la capital de España, sus actividades se realizan en la antigua central eléctrica del Mediodía, reconvertida en centro cultural. En la ciudad condal, CaixaForum se ubica en un edificio modernista barcelonés que en su día fue una fábrica textil. El diálogo entre la Generalitat y la entidad financiera catalana avanzan sin prisa pero sin pausa.
La negociación para compartir la programación del Museo radica en qué proporción asumirá cada parte y bajo qué condiciones. La Generalitat no quiere desentenderse por completo de la actividad cultural en el antiguo convento. Pretende preservar una serie de fechas con el fin de conservar un margen de maniobra para poder intervenir en un centro que se rehabilitó (una actuación centrada en restaurar el dormitorio, el aula capitular y el refectorio del antiguo convento) con el fin de convertirlo en un espacio de referencia dentro de la gestión cultural de la Administración autonómica. La crisis, sin embargo, obliga a reinventarse y redefinir objetivos.
Johnson compareció por primera vez como Consellera de Cultura en Les Corts el pasado 14 de septiembre, y entonces ya adelantó la aplicación de una serie de medidas que su departamento lleva encauzando desde hace meses.
La consellera anunció que en el futuro se aplicarán desgravaciones fiscales en el ámbito autonómico para empresas que inviertan en cultura, y que a nivel estatal se trabajará para el desarrollo de una ley de mecenazgo. Tanto Trini Miró, antes, como su sucesora y actual responsable de Cultura han acudido a todo tipo de actos de ámbito nacional con el asunto del mecenazgo bajo el brazo. La actual consellera de Cultura, ya puso de manifiesto en aquella intervención en Les Corts algo que ejemplifica de manera evidente esta negociación entre la Generalitat y la obra social de la entidad financiera catalana.
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