Proponen que los tinglados de Renfe sirvan de oficinas o cafetería para la Estación

La Asociación Cultural Alicante Vivo mostró ayer su satisfacción por el inicio de los trámites para la protección de los tinglados del siglo XIX de la Estación de Renfe por parte del Ayuntamiento.

El colectivo considera que los tinglados pueden adaptarse perfectamente a los usos que necesita el AVE «como cafetería, sala de espera u oficinas ya que son edificios muy versátiles y con un interior diáfano, muy fácilmente adaptables a nuevos usos».

Respecto a la necesidad de aparcamiento, señalan que la estación provisional del AVE dispondrá de cinco a su alrededor: Maisonnave, Alfonso el Sabio, Catedrático Soler, Cuartel de Benalúa y otros de menor tamaño como el de la Muntanyeta o incluso el de la calle Carlet. Ello sin contar con el inacabado de la avenida de la Estación que se encuentra justo delante.

En su opinión, la defensa de estas naves por parte del Consistorio «es sin duda un triunfo del sentido común y es una muestra del cambio de mentalidad de la sociedad alicantina que no está dispuesta a que le digan desde fuera qué edificios se deben conservar y cuáles no».

La asociación recuerda que Alicante «ha perdido ya buena parte de su patrimonio» y considera que «no se puede consentir que se pretendan derribar unos edificios sin motivo alguno ya que como defendíamos, con los planos en la mano, los 'históricos tinglados de piedras hexagonales' en palabras de Adif, no interferían en absoluto a la llegada del AVE».

Alicante Vivo confía en que el Ayuntamiento vaya aún más allá de la protección de los tinglados y que se implique «en el mantenimiento, ya que el abandono y los saqueos pueden propiciar su derribo, algo a lo que ya estamos muy acostumbrados porque se produjo con los silos de San Blas».