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REDACCIÓN
Miércoles, 14 de diciembre 2011, 01:44
Como cada año cuando se acerca la Navidad, el colectivo Cruz Roja Castellón quiere rendir homenaje a aquellas personas y entidades solidarias que han destacado por su labor diaria y sus buenas prácticas, como es el caso del Padre Ricardo, quien ya sea a través de su fundación o el albergue que dirige, presta su ayuda incondicional a los más desfavorecidos.
Él será pues, anunciaron ayer fuentes de Cruz Roja a través de un comunicado, el merecedor de la medalla de oro que cada ejercicio entrega la entidad sin ánimo de lucro. Al acto, que se celebrará mañana jueves a las 10.30 horas en el centro de día que gestiona el colectivo en la capital de la Plana, está previsto que asista el alcalde de la ciudad, Alfonso Bataller; el obispo de la Diócesis Segorbe-Castellón, Casimiro López; la diputada provincial Esther Pallardó y Santiago Pérez, alcalde de Forcall, como máximo representante de la localidad natal del Padre Ricardo; entre otros.
Pero lo cierto es que no sólo el religioso recibirá una mención especial, y es que Cruz Roja -que en la actualidad cuenta con 19 asambleas locales, cerca 16.000 socios y más de 4000 voluntarios en la provincia- también distinguirá como cada año a su socio más pequeño, que en esta ocasión son dos hermanitos; al más mayor, Carmen Borrull y también a las empresas más comprometidas con los desfavorecidos, Ferro Spain y Talleres Rapalo.
Además, la familia García Mañes, «siempre dispuestas a ayudar a los necesitados», según Cruz Roja, recibirá este jueves el más caluroso reconocimiento por parte de la organización. Y todo ello acompañado por los acordes del violonchelista José Enrique Bouche, quien también es socio del colectivo.
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