Funcionarios del juzgado de Alzira trabajan entre montañas de papeles

Mala ventilación, montañas de papel por todas partes, plagas de insectos, carencia de aseos públicos y ocho casos de media que resolver cada día. Así se plantea la jornada para un trabajador del juzgado de lo Penal de Alzira. En esta institución reina el desorden, las cajas que impiden el paso y una escasa renovación del aire interior del edificio. Los trabajadores se quejan del trato «inhumano» por parte de la administración, ya que están «expuestos a riesgos en cuanto a seguridad y a sanidad».

Por todo ello, exigen «unas nuevas dependencias» para el juzgado o, en caso contrario, que cierren las instalaciones que ocupan. Además, las actuales oficinas, ubicadas en la plaza de la Generalitat, tramitan los procedimientos relativos de los partidos judiciales no sólo de Alzira, sino también de Xàtiva y Ontinyent, «otro motivo más para que nos den un espacio mejor si quieren que saquemos adelante semejante volumen de trabajo», apuntan.

Este juzgado abrió en 2007 y pocos meses después los trabajadores vieron que el lugar «no era adecuado». Hartos de tener que sortear kilos de papel para acceder a un expediente concreto, o de tener que salir del recinto para acudir a un lavabo, acudieron a un sindicato para que les ayudase en su causa. Asimismo, denuncian que el recinto no posee vías de evacuación ni salidas de emergencia. «Se trata de una situación que puede ocasionarnos desgracias, problemas en la salud pero no son los únicos perjuicios que nos está causando», señalan los funcionarios. El personal se encuentra «hacinado, apenas cabemos nosotros, por lo que, cuando alguien viene a declarar , tiene que esperar en la calle. No tenemos sala de espera». El volumen de trabajo se traduce en unos ocho o incluso nueve juicios que celebrar diariamente, lo que ya ha provocado cuadros de «estrés laboral». Ante la avalancha de casos, mandaron a otro juez y a un secretario, «pero no han ampliado el resto de plantilla», cuentan los trabajadores.

Así, Intersindical Justicia ha presentado una denuncia ante la Inspección Provincial de Trabajo de Valencia «por el incumplimiento de las disposiciones mínimas de seguridad y salud en el lugar de trabajo y por los riesgos psicosociales que pueden sufrir los trabajadores».

El sindicato todavía no ha recibido notificación de la inspección, por ello asegura que no pararán «hasta conseguir unas condiciones dignas de lugar de trabajo y de gestión del mismo» para este juzgado.