«Unos 80 municipios valencianos podrían entrar en quiebra»

No es la primera vez que la presidenta de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias y alcaldesa de Alzira, Elena Bastidas, anuncia que hay ayuntamientos de la Comunitat Valenciana al borde de la quiebra. De hecho, el de Albaida ya se ha declarado oficialmente en bancarrota. Ayer, Bastidas, señaló en los micrófonos del programa Bon Matí de Ràdio Nou que este año unos 80 municipios valencianos podrían entrar en quiebra.

Bastidas señaló que en la Federación Española de Municipios y Provincias elaboraron unos informes que concluyeron que en España unos 800 ayuntamientos podría declararse en bancarrota durante este ejercicio. «Como en la Comunitat representamos el diez por ciento de la población de España, el diez por ciento de la deuda, pues serán unos ochenta municipios los que entren en quiebra».

La alcaldesa de Alzira, que renunció a entrar en Les Corts Valencianes como diputada para centrarse en la actividad de su municipio, reconoció que la situación es «desoladora» y apuntó que los municipios van a pasar serias dificultades. Ya lo dijo Bastidas la semana pasada cuando recibió al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, en la sede de la FVMP para celebrar los treinta años del nacimiento de la institución.

En ese encuentro, la presidenta de la FVMP apuntó que los ayuntamientos valencianos asumen competencias que no les corresponden y que son cuestión del Estado o de la Generalitat. En concreto hasta un 30% de obligaciones que en principio no deberían ser atendidos por los municipios. Esta situación conlleva un gasto que en ocasiones no pueden soportar las entidades locales que en muchos casos se han visto obligadas a no poder hacer presupuestos para este ejercicio al ser sus gastos muchos mayores a los ingresos.

Es cierto que durante la entrevista la presidenta de la Federación Valenciana de Municipios reconoció que no se han hecho las cosas bien del todo a nivel local en la gestión de los Ayuntamientos pero tampoco realizó una autocrítica severa de la proliferación de piscinas cubiertas, auditorios y polideportivos, entre otros ejemplos, que ahora son muy costosos de mantener. Bastidas, como ya reclamó la semana pasada, solicitó la puesta en marcha de una ley de Gobierno Local que sirva para paliar en parte las estrecheces de los municipios de toda España. La alcaldesa de Alzira reclamó una reforma urgente del actual sistema de financiación local «que está igual que en 1978».

Uno de los datos en los que insistió la dirigente del PP es que los ayuntamientos han pasado de pagar en un máximo de tres meses «a estar el plazo entre los seis meses y los tres años, y sabemos que esto perjudica gravemente a los autónomos y a las pequeñas y medianas empresas». Bastidas defendió a las diputaciones como ayuda a los pequeños municipios y defendió que mancomunen determinados servicios.