

Secciones
Servicios
Destacamos
LAURA GARCÉS
Jueves, 1 de marzo 2012, 13:24
Las mujeres afectadas por los implantes mamarios PIP han obtenido una nueva respuesta. Las Comunidades Autónomas aprobaron ayer en el Consejo Interterritorial, presidido por la ministra Ana Mato, un protocolo en virtud del cual «los hospitales públicos extraerán las prótesis cuando los médicos lo consideren necesario» porque estén rotas o presenten algún defecto que pueda causar problemas de salud a sus portadoras, según explicó la Conselleria de Sanidad.
El conseller de Sanidad, Luis Rosado, aseguró ayer que el número de mujeres portadoras de prótesis PIP en la Comunitat puede situarse entre «las 6.000 y las 10.000», si bien en todo momento desde su departamento insistieron en que no en todos los casos se planteará la extracción, sino en «los que sea necesario». Hasta ahora desde Sanidad se habían confirmado 639 casos, los correspondientes a pacientes a las que se le implantaron esas prótesis en centros públicos.
El departamento autonómico explicó que ahora cuando a una mujer que se implantó prótesis mamarias le surjan dudas sobre su situación tendrá que dirigirse a la clínica o cirujano donde se practicó la intervención. En el caso de que ya no pueda localizarse el centro clínico o el cirujano no ofrezca una respuesta satisfactoria a la paciente podrá ponerse en contacto con los servicios sanitarios públicos.
Se someterá a la revisión pertinente en su hospital de referencia de la red pública y si el cirujano «lo considera necesario porque haya existido una rotura o un problema» se podrá someter a la intervención para la extracción de las prótesis. En ese caso, puntualizan desde Sanidad, la conselleria «cargará los costes de la intervención a la clínica privada» donde la paciente se hubiera implantado la prótesis.
¿Y si la clínica ha desaparecido? Si ello sucediera, el departamento autonómico se dirigirá al cirujano, en tanto que considera que la responsabilidad «es de la clínica o del cirujano». En principio las autoridades sanitarias «comunicarán al médico la situación y si no responde se pasará a la vía judicial».
Respecto a la opción de que después de la retirada de las prótesis pueda llevarse a cabo un nuevo reimplante, la Conselleria de Sanidad descartó esta posibilidad. Explicó que hay que tener en cuenta que la sanidad pública «es garantista, no finalista por lo que su fin es la curación». Ante este planteamiento «si no se da el caso de que el fin sea para paliar una enfermedad, no se reimplantará».
Eva Jiménez, presidenta de la Asociación Nacional de Afectadas por las Prótesis Mamarias PIP, destacó ayer que el protocolo aprobado no satisface las aspiraciones de estas mujeres que lo que persiguen «es que se reimplante la prótesis en la misma intervención». Insistió en que de lo contrario a las afectadas «no nos vale que extraigan la prótesis y luego tengan que volver a operarse para un reimplante».
Ante el descontento que reina entre l os cientos de mujeres que se han visto en una situación que no podían imaginar llevó a Eva Jiménez a afirmar en referencia a la administración que van «a conseguir que salgamos a la calle porque son tan responsables la sanidad privada como la pública».
La presidenta de la asociación insistió en que están estudiando llevar a cabo algún tipo de protesta en la calle. Además, están realizando visitas por distintas ciudades españolas para ofrecer información a las mujeres portadoras de estas prótesis y que de alguna manera se estén viendo afectadas. Recientemente visitaron Murcia y este fin de semana irán a Castellón. La asociación, constituida en Valencia, es nacional y cuenta con cientos de asociadas que reclaman soluciones.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Favoritos de los suscriptores
Destacados
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.