Investigan a un banco por inflar gastos hipotecarios a extranjeros

La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) anunció ayer que está estudiando interponer una demanda judicial colectiva contra la sucursal en Vila-real de la entidad Caixa Galicia por «sus presuntas malas prácticas», según explicó una de las responsables de la asociación, Maria Jesús Garrido, quien añadió que «todo está en manos de un abogado y, en última instancia, será él quien decida si la demanda se presenta contra la entidad o esta sucursal en concreto».

Garrido indicó que «desde hace dos semanas tenemos conocimiento de que existen al menos seis ciudadanos de Castellón que han sufrido un presunto caso de abuso y posible estafa por parte de la sucursal de Caixa Galicia en Villarreal» y señaló que cinco de ellos están localizados y están tratando de ponerse en contacto con el sexto.

Asimismo, la representante de la asociación denunciaba que todos los casos presentan similitudes como que «se trata de ciudadanos extranjeros, que no entienden bien nuestro idioma y todas las concesiones hipotecarias se realizaron en el año 2007, con la misma persona como director. Además, todos los inmuebles se compraron a través de inmobiliarias que les facilitaron la sucursal de Vila-real para que les realizara el préstamo».

En este sentido, Garrido explicó antes los medios que las «presuntas irregularidades» consisten en que «existe una diferencia entre el contrato hipotecario y lo escriturado o bien hay gastos que desde la oficina no han podido justificar».

En este sentido, puso de relevancia el hecho de que cuando los afectados se han percatado de la situación «nadie ha sabido explicarles en concepto de qué había salido ese dinero de sus cuentas sin permiso de los titulares y tampoco existe justificación de dónde está el dinero». Por estos motivos, alegó que «estudiamos iniciar el recurso por vía penal porque creemos que hay suficientes indicios».

Asimismo, Garrido criticó la pasividad del Banco de España que no actuó en su momento pese a recibir las cartas de los afectados explicando su situación y la presunta estafa, pese a que debería haber actuado de oficio.

Uno de los afectados es George Trintea, que lleva protestando en las puertas de la entidad desde marzo de este año y piensa seguir haciéndolo «mientras pueda y alguien me de una solución», afirmaba ayer.

Este vecino relataba que firmó en el mes de marzo de 2007 su hipoteca con la citada sucursal de Caixa Galicia y después de tres años y medio pagando, «tuve una incidencia en la tarjeta de crédito, revisé la documentación y me di cuenta de que había una diferencia entre lo que se había escriturado por el piso -129.000 euros- y el importe total del préstamo hipotecario», alegó.

Ahora Trintea reclama a la entidad 15.000 euros «que nadie ha sabido justificarme a qué gasto corresponden» y, mientras tanto ha dejado de pagar la hipoteca hasta recibir una respuesta. «No me di cuenta porque no revisas los papeles es un banco y te fías», afirmaba.

La misma situación vivió Dinu Miyah, cuyo importe de hipoteca asciende a los 180.000 euros aunque la escritura del piso está realizada por un importe de 128.000 euros, «el resto son gastos». Mihay aseguró que al año y medio se dio cuenta de esta diferencia pero «al pedir justificación de todos los gastos, aparecieron entre la documentación dos cheques al portador por valor de 10.000 euros que no me han justificado».