Fabra avisa tras el cese de Vivancos: los altos cargos son la imagen del Consell

No habían transcurrido ni diez minutos desde que se iniciara en la sede del PPCV la reunión entre parte de la nueva ejecutiva regional con todos los altos cargos del Consell, cuando se presentó casi por sorpresa el presidente de esta formación y de la Generalitat, Alberto Fabra.

El líder de los populares valencianos realizó una intervención corta, pero contundente, ante un auditorio repleto de altos cargos autonómicos que había convocado su número dos en el partido, Serafín Castellano.

La cúpula regional del PPCV no quiere que haya declaraciones altisonantes que puedan ocasionar crisis internas o que simplemente puedan dar pie a una crítica fácil a la gestión autonómica o a los miembros del Gobierno valenciano por parte de determinados colectivos o de formaciones de la oposición en Les Corts, como sucedió la semana pasada con las declaraciones de Mariano Vivancos. En Ontinyent llamó talibanes a profesores de la enseñanza pública, lo cual sentó mal entre los docentes, que ya estaban en pie de guerra contra la Generalitat y la política de ajustes que está aplicando. Mariano Vivancos fue destituido del cargo que ocupaba, director de la Agencia de Evaluación y Prospectiva, en el pleno del Consell del último viernes.

Tras aquel episodio y la contundente respuesta del Gobierno valenciano, Fabra avisaba ayer a los altos cargos de su Consell. «Somos responsables de la imagen del Gobierno y del partido», afirmó.

Fabra, por ende, advirtió a los altos cargos de su administración de que «tenemos que ser responsables con la imagen que transmitimos», en especial en el actual momento delicado que atraviesa la Comunitat Valenciana y el resto de España. «Tenemos que estar a la altura de las circunstancias y de las demandas de los ciudadanos», avisó el presidente.

Alberto Fabra reclamó a los altos cargos autonómicos y del partido que deben lanzar «un mensaje muy positivo» y, sobre todo transmitir confianza, «vamos a seguir adelante».

A su llegada al salón de reuniones de la calle Quart, y todavía entre aplausos, Alberto Fabra , literalmente, se interpuso en la mesa presidencial entre sus dos hombres fuertes en el partido y en el Gobierno: su secretario general, Serafín Castellano, y su vicepresidente del Consell, José Císcar.

Al encuentro asistieron cerca de 200 altos cargos, entre miembros de la administración autonómica -acudieron los consellers María José Catalá, Lola Johnson, Luis Rosado, Máximo Buch, José Manuel Vela, Jorge Cabré e Isabel Bonig- y parte de la cúpula del PP.

La llegada del presidente de la Generalitat interrumpió el discurso inicial del secretario general. Mientras el auditorio aplaudía, Alberto Fabra, tras saludar, acercaba al estrado una silla para que se sentara junto a él y Serafín Castellano el vicepresidente del Consell José Císcar, que se había levantado de la presidencia de la mesa para cederle su asiento al propio Fabra.

La reunión, según explicó Serafín Castellano antes de iniciarse el encuentro, acompañado por el vicepresidente Císcar -no estaba previsto que compareciera junto al secretario general ante la prensa-, era para coordinar a los cargos de la Generalitat con las secretarías y vicesecretarías de área del partido.

El encuentro fue convocado para que buscar la «unidad de mensaje», que haya «un discurso coordinado» entre el partido y el Gobierno autonómico y, sobre todo, que en las alocuciones de los cargos público se conceda prioridad a «aquello que interesa al ciudadano», explicó el secretario general y conseller de Gobernación, Serafín Castellano.

El número dos del PPCV, que actuó como la voz de la dirección del partido, incidió en un mensaje que no parece haberse cansado de lanzar desde que fue elegido secretario general de los populares de la Comunitat Valenciana: «Hay que preocuparse de los problemas de la gente, que es lo más importante. Y en estos momentos lo más relevante es la crisis económica, el desempleo y el mantenimiento de la sociedad del bienestar. Esas son las prioridades que hay».

Castellano reiteró que tanto desde el partido como desde el Ejecutivo autonómico debe salir un mismo mensaje hacia la sociedad valenciana. «Toda la gente afiliada al PP que estamos en cargos de responsabilidad, bien en el Gobierno, bien en otras administraciones públicas bien en la administración local, tengamos esa unidad de mensaje, esa unidad de discurso y esa priorización de la hoja de ruta que el presidente Fabra nos ha encomendado: que nos ocupemos de los problemas de la gente y que la agenda la marca la calle, no las cuestiones internas del partido».

El secretario general del PPCV avanzó, además, que habrá más reuniones internas «entre todos los cargos públicos del PP para que haya una perfecta coordinación de contenidos, de argumentario y de prioridades para dar soluciones a los problemas que hoy tiene planteados la Comunitat Valenciana».

Por su parte, el vicepresidente del Consell, José Císcar, trató de poner sordina al mensaje de unidad de discurso y de coordinación entre partido y Gobierno autonómico y lo centró más en que la ejecutiva regional del PP y los altos cargos del Consell deben de conocerse. «Tenemos que partir de la base, al margen de coordinar y dinamizar el discurso, de que tenemos que pensar también en que hay un nuevo organigrama, hay nuevas personas en el comité ejecutivo regional», motivo por el cual debe de haber «un contacto, un encuentro entre los altos cargos de la Generalitat y la nueva dirección», afirmó el vicepresidente del Consell.

¿Y por qué de tiene que producir ese contacto entre la cúpula regional y los altos cargos? Císcar daba la respuesta: «Como tienen que trabajar juntos, que se conozcan, que hablen y que tengamos todos las ideas muy claras».

En una cuestión sí coincidió el vicepresidente y portavoz del Consell con el secretario general del PPCV y conseller de Gobernación, Serafín Castellano, en que lo verdaderamente relevante son los problemas que interesan a la sociedad valenciana. «Ahora lo que importa son los ciudadanos y los problemas de los ciudadanos. Y ahí tiene que estar enfocado el Gobierno y el partido y en esa dinámica va a trabajarse», aseguró José Císcar, que es superior de Castellano en el Consell y a su vez es su subordinado en el partido.