Las tascas eludirán el nuevo veto al alcohol con el beneplácito del PP

Las tascas de Castellón están dispuestas a plantar cara al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) y dar carpetazo de una vez por todas a la llamada ley seca. Los empresarios, que cuentan con el apoyo del equipo de gobierno del PP, tienen previsto hacer caso omiso al auto dictado la semana pasada por el tribunal y que anula el artículo 26 de la ordenanza municipal que regulaba esta práctica. Un artículo aprobado el pasado mes de marzo por unanimidad de todos los grupos que conforman la Corporación y que, si todo sale según lo previsto, verá definitivamente la luz este viernes.

«Los trámites para legalizar el alcohol en las tascas siguen su curso», sentenciaba ayer el alcalde, Alfonso Bataller, tras ser preguntado por la oposición durante la junta de portavoces celebrada por la mañana. «Los servicios jurídicos del Ayuntamiento están haciendo todo lo posible para solucionar la situación», añadía.

No obstante, y a pesar de las intenciones de los hosteleros de las tascas y el Consistorio, lo cierto es que los vecinos de las calles Isaac Peral y Barracas, representados por la plataforma Castelló Sense Soroll, cuentan con una sentencia que les da la razón y que anula por segunda vez el artículo con el que el Ayuntamiento buscaba regularizar el consumo de bebidas alcoholicas en esta céntrica zona de ocio.

En este sentido, incluso el portavoz del Bloc en la capital de la Plana, Enric Nomdedéu, quien siempre ha sido y es un firme defensor de las tascas, reconoce que la situación es «muy compleja», pues, «en principio, la anulación del artículo debería obligar a reiniciar el proceso de aprobación del mismo».

Aún así, los empresarios, que ayer volvieron a reunirse con el concejal de Sostenibilidad de Castellón, el popular Gonzalo Romero, lo tienen claro. «Este viernes se volverá a beber en la calle», aseguraban, para a renglón seguido manifestar una vez más su «malestar» ante una situación que califican de «insostenible».

Y es que no hay que olvidar que las tascas llevan desde finales del año pasado tratando de poner fin a la ley seca instaurada a raíz del primer fallo del TSJCV, que anulaba el artículo 26 de la ordenanza de convivencia ciudadana «por ser contrario a la Ley Valenciana sobre Drogodependencias y Otros Trastornos Adictivos».

Desde ese mismo momento, tanto el equipo de gobierno del PP como el resto de partidos que conforman la oposición se pusieron manos a la obra para aprobar un nuevo texto que legalizara el consumo de alcohol en este emblemático entorno. Sin embargo, apenas unos días antes de que el modificado artículo viese la luz, el TSJCV volvió a tumbarlo.

Criticas a Sense Soroll

Pero los hosteleros no están dispuestos a cambiar sus planes y, además de anunciar que este viernes acabarán con la ley seca, tampoco descartan denunciar públicamente los «ataques injustificados» que dicen sufren por parte de Castelló Sense Soroll. «Quieren acabar con nuestros negocios y no se lo vamos a permitir», indicaron.