El Casino de Gandia cierra y deja a 33 personas en el paro

El Casino Cirsa Gandia cierra sus puertas tras ocho años de actividad en la playa. La empresa se ha visto abocada a clausurar el salón de juego por varios motivos, como la imposibilidad de renovar el contrato de alquiler o el descenso de clientela durante los últimos años. La mercantil prevé presentar un Expediente de Regulación de Empleo que afectará a 33 trabajadores, pero, según informaron desde Cirsa, pretende abrir una negociación con todos los empleados.

El casino clausurará su actividad el día 9 de septiembre, coincidiendo con el fin del contrato de alquiler. Los responsables de Cirsa explicaron que no ha sido posible renovar el arrendamiento en condiciones parecidas a las que tenían.

Siete años

«El dueño quería un nuevo contrato para siete años y Cirsa aspiraba a una duración menor con posibilidad de renovación, tal y como se ha realizado hasta ahora. No podíamos vincularnos por un periodo tan largo teniendo en cuenta la situación económica actual», explicaron.

Otro de los factores con los que se ha topado Cirsa ha sido la imposibilidad de hallar en Gandia un local similar y «que cumpliera con la normativa autonómica de juego».

«Hemos valorado varias opciones en Gandia, pero finalmente no se ha encontrado ningún local que se adaptara a las normas valencianas», agregaron.

Esta ley es muy estricta y no permite la instalación de casinos, salas de juego o bingos en un espacio cercano. De hecho añadieron, uno de los locales que cumplía con sus necesidades en la playa de Gandia estaba «muy cerca de un bingo».

Ante todos estos inconvenientes y teniendo en cuenta que el volumen de jugadores ha mermado desde hace cinco años, la empresa del casino ha decidido poner fin a su actividad en Gandia y descartan establecerse en otra población: «Nos centraremos en otros locales que tenemos en Valencia».

Por otra parte, lamentaron que se vayan a perder los 33 puestos de trabajo y afirmaron que no hay posibilidad de reubicarlos en sus otros negocios debido al descenso de clientela, que ha sido generalizada en los últimos tiempos.